El técnico del Real Mallorca, Michael Laudrup, junto a Miquel Angel Nadal, en el partido correspondiente a la segunda jornada de liga ante el Espanyol. | Monserrat

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Tras dos semanas de erupciones volcánicas; de la pérdida del jugador franquicia al enemigo público número uno; de la pifia en el intento de fichaje del delantero centro; de la histórica «rajada» de Laudrup; de los silencios de Serra Ferrer... el Mallorca vuelve a reencontrarse con el balón. Con el juego. Con el fútbol. Y lo hace en la hoguera del Villamarín, donde se esperan temperaturas cercanas a los 40 grados a la hora del partido.

Aunque sigue siendo pronto para calibrar la moral de un grupo que parece haber perdido calidad y olfato durante el verano, el técnico danés obtendrá hoy el diagnóstico inicial del proyecto. Y en el vestuario son conscientes de que un buen inicio marcará el destino (Benito Villamarín, Canal + Liga 2, 12.00 horas).

Se mide la escuadra balear a un conjunto de su misma talla y pelaje, inmerso también en un delicado proceso concursal, que llega al envite con tres puntos en sus alforjas, tras vencer en Granada. Laudrup, que hace apenas una semana estaba más fuera que dentro de la entidad, ha advertido que hoy el equipo se encontrará un escenario muy diferente al del capítulo inicial. Entre otras cosas porque el autor del gol (De Guzman) ya no viste la casaca bermellona... con todo lo que ello implica.

La baja de Martí empujará al técnico a la improvisación. Reforzará la sala de máquinas con un doble pivote formado por Joao Victor y Tomás Pina, por lo que Fernando Tissone -el teórico sustituto de De Guzman- arrancará en el banquillo... o será uno de los dos descartados.

Aparte del contratiempo que ocasiona la ausencia de Martí, el entrenador ha podido recuperar a Dudú Aouate y parece que también a Emilio Nsue. La duda estriba en la presencia de Sergio Tejera o del Chori Castro que se disipará a la hora del desayuno.

Alineaciones probables

Real Betis: Casto, Chica, Amaya, Dorado, Nacho; Iriney, Beñat, Salva Sevilla; Jefersson, Jorge Molina y Rubén Castro.

Real Mallorca: Calatayud (Aouate); Zuiverloon, Chico, Ramis, Cáceres; Nsue, Joao Víctor, Pina, Tejera, Alfaro; Hemed.

Àrbitro: Carlos del Cerro Grande (c.madrileño)