Desde hace varias semanas el Mallorca vive una historia que se repite una y otra vez jornada tras jornada. Es como la película 'Atrapado en el tiempo' donde Bill Murray revive las mismas escenas día tras día. En Son Moix casi cada partido de Liga de un tiempo a esta parte es más o menos idéntico y la parroquia rojilla se pregunta si esta vez se la permanencia pasará de ser virtual para convertirse en un hecho consumado.
Una victoria hoy en La Rosaleda permitiría a los baleares sumar 42 puntos, lo que garantizaría la permanencia en Primera División una temporada más. No es que ahora exista un claro temor a bajar, pero los aficionados han visto tantas cosas raras en estos últimos años, que nadie se atreve a destapar el champán hasta que las matemáticas dicten sentencia. Viene a ser como la previsión meteorológica. Para mañana indica cielo soleado y subida de las temperaturas, pero ¿y si todo cambia de madrugada? Pues eso. Así vive el Mallorca y esta tarde quiere mejorar su calidad de vida.
Esperanza
Para ello es necesario ganar a uno de los firmes candidatos para el descenso de categoría y que precisamente se aferra a la esperanza en el partido que le enfrenta al Mallorca en La Rosaleda. Mirando la clasificación, quien verdaderamente está en serios apuros es el equipo de Manuel Pellegrini y no el grupo de Michael Laudrup. 30 puntos en la jornada 31 de Liga es un bagaje más que pobre y que obligan a realizar un esfuerzo mayúsculo para evitar la catástrofe.
Los baleares tratarán precisamente de jugar a favor de viento, de manejar la ansiedad del rival a su favor y, sobre todo, de mejorar la imagen ofrecida en la última salida esta temporada. En Coruña el Mallorca mostró dos caras, la buena y la peor y eso impidió sumar tres puntos que ahora permitiría realizar un serio cambio de objetivos. Laudrup espera que el equipo haya aprendido de ese partido y que el equipo entienda que los encuentros no duran 45 minutos, sino el doble. Pero en ocasiones hasta a los profesionales se les tiene que recordar el 'abc' de su trabajo. Ante el Sevilla también se vio a un Mallorca muy enchufado en el primer tiempo, pero algo más dubitativo en el segundo. No obstante, las circunstancias emocionales de ese partido no serán las que presente esta tarde el choque en La Rosaleda y ese factor en fútbol también cuenta, sobre todo cuando se avista el final de la temporada.
Los jugadores del equipo andaluz tienen una prima especial para ganar hoy, pero de poco o nada servirá si mantienen la imagen que les ha llevado a perder 17 partidos esta temporada. Deportivamente Nsue y Castro pueden situarse en las bandas, mientras que Joao Victor se antoja el socio de Martí en la sala de máquinas. Tejera parece que actuará de segunda punta y delante se situará Webó, la referencia atacante del Mallorca esta temporada. Sus siete goles son su mejor aval. De Guzman y Pereira se quedan en Palma, mientras que Laudrup incluye en la lista al canterano mallorquín Ximo.
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