Rafa Nadal, en el último torneo que disputó este año, en Acapulco.

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El regreso de Rafael Nadal a las pistas se produce esta semana próxima en el torneo de Roma, donde luchará por conquistar por décima vez el título en el Foro Itálico.
Será un torneo atípico, sin público por las normas contra el coronavirus, y marcado por una pregunta: ¿Estará Nadal en condiciones de luchar por la victoria final, después de casi seis meses de inactividad por la pandemia?. Esa es la gran cuestión que se cierne en este Masters 1.000 que precede a Roland Garros.

El último partido de Nadal este año se produjo en la final del torneo de Acapulco (1 de marzo) cuando se hizo con el título 85 de su carrera al derrotar al estadounidense Taylor Fritz. Desde entonces, el actual número dos del mundo y defensor del título en Roma, ha permanecido en Manacor confinado, renunciando al US Open y preparando su regreso a la tierra.

No ha sido el caso del número uno del mundo, Novak Djokovic, al que le ha sucedido de todo. Participación en el Adria Tour, donde se contagió de coronavirus, y descalificación en el US Open, tras propinar un bolazo a una jueza de línea.

Antes, se había mostrado implacable ganando los títulos de la Copa ATP, Abierto de Australia, Dubai y Cincinnati, hasta que cometió la fatalidad del «bolazo» neoyorquino en el partido contra el español Pablo Carreño.

Ambos, Nadal y Djokovic, son los líderes en cuanto a número de torneos Masters 1.000 ganados, con 35, y el año pasado se enfrentaron en la final en el Foro Itálico, un partido que Nadal ganó por 6-0, 4-6 y 6-1, antes de reclamar su duodécima corona de Roland Garros.

El español buscará un décimo título de Roma para ampliar el récord la próxima semana. Djokovic se ha coronado campeón cuatro veces en la capital italiana.
Al cuadro de Roma faltarán, entre otros Dominic Thiem y Alexander Zverev, que han preferido descansar tras lograr la final del US Open y el español Roberto Bautista, a la espera de su primer hijo.

Sí participan, el griego Stefanos Tsitsipas, el italiano Matteo Berrettini, el francés Gael Monfils y el belga David Goffin, entre otros grandes nombres.
Además del Masters 1.000 se disputa el Premier Mandatory WTA, que contará con seis de las 10 mejores jugadoras del mundo, y con la checa Karolina Pliskova en la defensa del título.
Son varios los grandes nombres que vuelven a la acción, incluyendo a la número uno, la rumana Simona Halep y la número 4, la ucraniana Elina Svitolina, campeona en Roma en dos ocasiones.

A ellas se unen la holandesa Kiki Bertens, y la suiza Belinda Bencic, y las exganadoras de Roland Garros, la letona Jelena Ostapenko y la rusa Svetlana Kuznetsova. De esa lista sólo Halep, que ganó el título en Praga hace un mes, y Kuznetsova, que perdió su primer partido en Estambul, han competido oficialmente desde el cierre del circuito en marzo.
Significará también el regreso a la tierra de la española Garbiñe Muguruza, tras caer en la segunda ronda del US Open contra la búlgara Tsvetana Pironkova. Con difícil debut de Garbiñe, que se tendrá que medir en primera ronda con la exnúmero tres del mundo la estadounidense Sloane Stephens.