TW
0

Roland Garros define a los dos elegidos para pelear por la gloria y Rafael Nadal aspira a ganarse un puesto en la batalla por la corona. Para optar a su novena Copa de los Mosqueteros y aspirar a conservar su reinado en la ATP, el número uno del mundo afronta hoy (15.30 horas aproximadamente / Discovery Max) el desafío que le plantea Andy Murray en la segunda semifinal, ya que Djokovic y Gulbis abrirán el fuego a las 13.00 horas.

El de hoy es el vigésimo duelo entre Nadal y Murray y en 14 ocasiones la victoria fue para el número uno del mundo. Su enfrentamiento más reciente se produjo el pasado Masters 1000 de Roma y Nadal se vio obligado a remontar un set en contra para acabar llevándose el partido en la última manga por 7-5. Sin embargo, aunque la cita también fuera sobre tierra batida, las condiciones eran diferentes a las que marcarán la semifinal de esta tarde. No será un duelo nocturno como en el Foro Itálico y precisamente el sol que se espera en París se convierte en un buen aliado para el manacorí, cuyo estilo de juego agradece el bote vivo de un día seco y caluroso.

Tras aparcar sus problemas de espalda que condicionaron su saque en las rondas iniciales, Nadal quiere su vigésima final en un grande y para ello necesita apuntalar su progresión con el servicio y disipar las dudas con el revés que tanto le lastraron ante Ferrer. El propio Nadal fue el primer sorprendido por sus prestaciones a la baja después de confesar que en los dos días previos había sentido mejor la pelota que en toda la temporada. Una jornada propicia en lo atmosférico y el regreso a la central, donde el número uno del mundo maneja las distancias como nadie, pueden servir al balear para presentar su mejor versión en el momento adecuado, tal como ha hecho siempre en el Grand Slam francés.

La experiencia, tras coronarse en ocho ocasiones en París y presentar un registro de 33 triunfos seguidos y 64 victorias en 65 partidos, está del lado de Nadal, que solo ha perdido tres de las 22 semifinales que ha disputado en los grandes.

Máxima efectividad

El balear tiene una efectividad máxima en esta ronda, a la que ha accedido con su tercer mejor registro de juegos perdidos. Murray, por su parte, se presenta por segunda vez en las semifinales, igualando su mejor resultado de 2011 y en busca de un nuevo hito para el tenis británico, que nunca ha contado con un finalista de Roland Garros en la Era Open. El escocés, con un balance de 23 triunfos y diez derrotas sobre la arcilla gala, ha ganado sus últimas cuatro semifinales de Grand Slam, pero también ha perdido seis de las 13 que ha jugado.

Tanto Nadal, que perderá su condición de número uno si cae en la semifinal, como Murray, que nunca ha ganado un torneo sobre tierra, saltarán a la pista sabiendo quien les aguardaría en el encuentro decisivo del domingo. Y es que antes de que el mallorquín y el escocés midan sus fuerzas, Novak Djokovic y Ernests Gulbis habrán decidido al primer finalista de la primera edición. El serbio, que busca completar sus vitrinas de grandes y recuperar el número uno, parte como favorito ante el jugador letón, debutante en estas lides y la sorpresa de la ronda de los cuatro mejores después de haber dejado en la cuneta a Roger Federer y Tomas Berdych. No se ven las caras desde 2011 y Djokovic ha salido airoso de cuatro de sus cinco enfrentamientos con Gulbis, cuyo talento e irreverencia le convierten en un jugador tan peligroso como poco fiable.