Los jugadores del Voley Palma celebran un punto la temporada pasada. | Voley Palma

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El Voley Palma competirá en la Superliga la temporada 2022-23. Aunque sigue en la búsqueda de un patrocinador principal, el respaldo financiero de Urbia Services ha permitido a la entidad darle viabilidad al proyecto en la máxima categoría del voleibol nacional. Tras fracasar las gestiones con el Atlético Baleares, el club que preside Carlos García ha salvado a tiempo el 'match ball' que tenía para poder cumplir los requisitos que de la Real Federación Española de Voleibol gracias al apoyo de un viejo conocido, ya que Urbia ejerció como sponsor principal campañas atrás en otra situación límite.

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«Ante la inminente finalización del plazo para poder inscribirse en la competición y gracias al aval de Urbia, el equipo determina participar a la espera de encontrar patrocinador principal que garantice la viabilidad y seguridad del club la próxima temporada. La constante ayuda que mantiene Urbia Services desde hace varias temporadas permite que el Voley Palma haya decidido finalmente la inscripción, a pesar de no contar con ese patrocinador principal», explica el comunicado del Voley Palma, que remarca que sigue buscando un patrocinador principal y hace un llamamiento a los aficionados para contribuir a la viabilidad económica de su proyecto.

Para minimizar las dificultades económicas el club que preside Carlos García espera la respuesta de sus aficionados en la campaña de abonados para «cubrir las necesidades de presupuesto mensuales con el apoyo de los patrocinadores secundarios que tiene hasta día de hoy, con la ayuda de sus seguidores, y con las buenas intenciones institucionales, para favorecer y apoyar al deporte de élite de la ciudad de Palma». En su comunicado el Voley Palma asegura que está planificado el próximo curso con «un equipo acorde a la situación actual que le permita pelear en la competición y mantener la plaza dignamente».