El presidente del RCNP, Javier Sanz, durante su intervención en la presentación de la Copa del Rey de vela. | Teresa Ayuga

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No será hasta el lunes cuando empiecen las regatas, pero la Copa del Rey Mapfre de vela ha empezado a vivirse en Real Club Náutico de Palma (RCNP), donde este viernes se ha presentado la mayor edición de su historia. Cerca de 160 barcos de 29 países competirán hasta el domingo 4 de agosto en 12 clases con la participación de 2.500 deportistas que darán forma al evento náutico de referencia en el Mediterráneo.

El presidente del Real Club Náutico de Palma, Javier Sanz, celebró el crecimiento de la prueba en la puesta de largo de «una edición récord» que subrayó que «es un referente de la vela y tiene en la Isla un impacto social, económico y estratégico». «Vívanla y disfrútenla», invitó en su exposición en la que remarcó la previsión de la UIB de que la prueba vaya a generar 25 millones de euros.

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La teniente de alcalde de Cultura i Esports del Ajuntament de Palma, Susanna Moll, situó la Copa del Rey como «uno de los actos más importantes que tenemos en la ciudad a nivel deportivo» y también hizo especial hincapié en «la repercusión deportiva, económica y social» de la prueba. Moll felició al RCNP por su 70 aniversario y valoró especialmente que «el Náutico es la puerta para acercar el mar a la ciudad y la ciudad al mar».

El director territorial de Mapfre en las Islas, Óscar Celada, expresó la satisfacción de la entidad por seguir al lado de la Copa del Rey a través de un patrocinio que afirmó que «deja constancia de nuestro compromiso con el deporte y con la vela».

Durante la próxima semana, de forma paralela a la competición junto a diferentes iniciativas de carácter solidario se desarrollarán como es habitual múltiples actividades de carácter social. En definitiva, elementos que contribuyen a que la Copa del Rey, además de ser la más grande de la historia, se afiance como un evento único.