Imagen de archivo de uno de los campeonatos de natación celebrados en las piscinas exteriores de Son Hugo. | IRENE HUMET

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Los clubes de natación de Ciutat, Voltor Balear, La Salle y Palma se sienten «al borde del abismo» y este martes, a través de un comunicado, expusieron su malestar con el Institut Municipal de l'Esport (IME) por su falta de colaboración a la hora de ofrecerles una salida para desarrollar su actividad. Sobre todo, una vez confirmado el cierre de la piscina exterior del polideportivo de Son Hugo.

Las entidades aseguran encontrarse «en el furgón de cola en el reparto de espacios en las piscinas municipales». Los tres equipos de Palma denuncian que «el cierre de la piscina exterior de 50 metros durante los meses de invierno provoca una saturación en la piscina interior que, además de inviable técnicamente para una actividad normal de los entrenamientos, produjo episodios insalubres durante la pasada temporada a nadadores».

Al mismo tiempo afirman que Cort, «con el pretexto de la crisis incipiente», les impide utilizar una instalación que durante la campaña invernal había permanecido a disposición de los mismos clubes entre 2002 y 2013 y denuncian que la situación se ha agravado este año debido a la reducción de espacio.

CN Voltor Balear, CN La Salle y CN Palma recuerdan que sus presidentes, a la vista de lo que se avecinaba a partir del día 2 de noviembre, presentaron un escrito con fecha 30 de septiembre dirigido a la regidora de Cultura i Esports, Susana Moll, y al actual gerente del IME, José María González, que hasta este martes aún no habían recibido respuesta.

Desde el IME, en cambio, aseguran estar «trabajando todas las posibilidades para ofrecer una solución» y que en breve se solicitarán fondos europeos para instalar una caldera de biomasa que permita que la citada piscina pueda permanecer abierta todo el año.