La tenista china Na Li con el trofeo que le acredita como campeona femenina del Torneo Roland Garros que se ha disputado en París. | Efe

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La tenista china Na Li se ha impuesto a la italiana Francesca Schiavone (6-4 y 7-6 (0)) en la final femenina de Roland Garros y se ha convertido en la primera jugadora asiática en alzarse con un título del 'Grand Slam'.

La china, sexta cabeza de serie, saltó a la mítica arcilla de la Philippe Chatrier con la lección aprendida tras caer en la última final de Australia ante Kim Clijsters en su primer asalto a un torneo del 'Grand Slam' y sometió a Schiavone, quinta favorita y ganadora en la pasada edición.

En la primera manga reinó la igualdad, como se plasma en el número oportunidades de rotura. Na Li aprovechó una de las tres de que dispuso, mientras que Schiavone no tuvo ninguna.

La mayor intensidad de la china se apreció en los golpes ganadores, con un total de diez por los tres de la italiana. En la red también dominaba la asiática, con un 80 por ciento de efectividad, por apenas 33 de la vigente campeona.

Todos estos números permitieron a Na Li alzarse con el primer parcial por 6-4 en apenas 39 minutos, lo que le colocaba un poco más cerca de hacer historia.

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La italiana acusó el golpe en los inicios de la segunda manga, y en el primer juego cedió tres bolas de 'break' a la china. Na Li aprovechó la oportunidad y puso la directa hacia su primer título en París.

Reacción tardía de Schiavone

Cuando parecía que con el 2-0 Na Li tenía el encuentro controlado, Schiavone ganó en concentración y comenzó a ser más agresiva con su servicio y al resto. Así, cuando la china servía para establecer el 5-3 y colocarse a un punto de ganar el encuentro, la italiana logró anotarse su primer 'break' y puso las tablas en el marcador.

Con 4-4, ambas aprovecharon su servicio, aunque con dificultades, y el segundo set derivó en el 'tie break'. La italiana se jugaba a una carta su ser o no ser en la final, mientras que la china se encontraba a un paso de hacer historia.

Tras lograr un primer 'mini-break', Na Li ganó en confianza y Schiavone se vino abajo. La dinámica del encuentro cambió en ese momento, quedando el esfuerzo realizado por la italiana en nada. Finalmente la china se adjudicó el desempate en blanco (7-0) y se alzó con la victoria.