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El entrenador del FC Barcelona, Josep Guardiola, ha celebrado que el juego desplegado por sus jugadores en el empate a uno contra el Real Madrid, que les ha dado el pase a la final de Liga de Campeones por el 0-2 de la ida, haya convertido el encuentro de esta noche en «otro partidazo» para conseguir el billete a Wembley, y ha celebrado también el llegar al final del ciclo «intenso» de los 'clásicos'.

«Hicimos un partido de ida extraordinario. Hoy hemos vuelto a jugar un muy buen partido que era difícil de gestionar mentalmente. Teníamos que ser muy valientes, y lo hemos demostrado. Mis jugadores me han dado una nueva lección con el 1-1, por cómo han jugado los últimos minutos. Ha sido un espectáculo, porque no es fácil. Han seguido jugando, sin muchas ocasiones pero han impedido que generaran ellos otra. Es admirable. Hemos hecho otro partidazo que nos ha llevado a la final», manifestó en rueda de prensa.

Poco más a añadir, y es que Guardiola resumió en esta respuesta el sentimiento de muchos aficionados culés. «Felicito a toda la gente que ha venido, ha sido una de las noches más bonitas por el apoyo de la afición. Felicito al Madrid por su atrevimiento, y a mis jugadores que después del empate en vez de defender y dar pelotazos han seguido jugando a fútbol», espetó.

«En la primera parte, excepto en los primeros 10 minutos que nos han salido fuertes, hemos cogido el balón y hemos hecho una muy buena primera parte. En la segunda nos ha costado un poco más. Es otro muy buen partido y estamos muy contentos», añadió en este sentido.

A partir de ahora, piensa en conseguir la Liga, a poder ser en el «terrible» derbi del domingo contra el Espanyol, y en preparar una final de Wembley que le hace mucha ilusión. «Es un éxito absoluto estar en dos finales en tres años, y quedarnos el pasado en las puertas. Lo han vuelto a hacer», dijo.

«Mi gratitud vuelve a ser infinita para estos jugadores, del primero al último. Cuesta mucho lo que han hecho, estoy muy orgulloso por tanta gente de la casa salida de aquí. La primera la ganamos en el antiguo Wembley e intentaremos ganar la cuarta en el nuevo», se sinceró.

No obstante, le haría más ilusión jugar en el antiguo Wembley, donde como jugador ganó la primera Copa de Europa del club en 1992. «Me haría ilusión si fuéramos al antiguo, con aquel carisma. Me hace ilusión estar, el año pasado nos quedamos a las puertas. Cuando hay un ciclo de estar tantas veces arriba, estamos hablando de un señor club», espetó.

También está contento de poder dejar atrás toda la tensión vivida estos días, en los que factores que van más allá del fútbol le han llevado a tener un extra de intensidad no deseada. «Han sido veinte días muy duros, intensos y con mucha tensión, y a ver si ahora descansamos un par de días, la gente lo celebra, y a prepararnos para conseguir los cuatro puntos que nos quedan para ganar la competición más bonita del año», espetó sobre la tensión extradeportiva vivida estos días y la cercana consecución del título de Liga.

En cuanto a las quejas del segundo entrenador blanco, Aitor Karanka, sobre el arbitraje, no quiso entrar al trapo. «No soy entrenador del Real Madrid, pues me parece muy bien. Porque nosotros felicitemos y ellos no, no somos nosotros los buenos. Estamos en un estado de derecho democrático, cada uno es libre. Hoy se ha acabado todo», celebró.

«Hemos superado a un súper equipo. Es un auténtico equipazo, no quiero menospreciar a mis jugadores pero si no es el mejor del mundo, por ahí va. Nunca les habíamos eliminado, hoy ha sido la primera vez», añadió en este sentido.

Por último, mención especial para el regreso de Abidal. «Es muy fuerte pero no deja de haber tenido un tumor en el hígado, así que nunca lo esperas. Pero estamos en una situación precaria en defensa, igual de tener a Adriano o Maxwell no le habríamos utilizado, pero los médicos dijeron que estaba bien para quince minutos, y nos iba bien», comentó.

«Estamos muy contentos por él, sigue siendo la noticia del día porque es por su fuerza de voluntad. Se lo dedicamos a él y su familia, a sus hijas. Es un jugador muy querido porque es todo corazón», manifestó emocionado.