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Natalia Arriaga|MADRID
Los miembros de la Comisión de Evaluación del COI que examinarán desde mañana jueves la candidatura de Madrid para los Juegos Olímpicos de 2012 son unos profesionales estrictos a los que es imposible «engañar con milongas» y que no se creen nada de lo que prometen las ciudades a no ser que venga avalado por documentos.

Así lo aseguran quienes, desde las candidaturas de Jaca y Sevilla, ya han pasado por la experiencia de someterse a este examen de aptitud que impone el COI a las aspirantes: Madrid debe estar preparada para atender a unos inspectores muy exigentes, no siempre fáciles de satisfacer.

La Comisión de Evaluación que preside la marroquí Nawal el Moutawakel estará en Madrid del 3 al 6 de febrero, primera escala de su gira por las cinco ciudades candidatas al 2012. Londres, Nueva York, París y Nueva York serán, por ese orden, las siguientes etapas.

Enrique Moreno de la Cova, miembro del Comité Olímpico Español (COE), fue el consejero delegado de Sevilla 2004, la primera de las candidaturas que presentó la ciudad andaluza, y recuerda la visita de la Comisión del COI como «una experiencia muy interesante» pero que exige una alta preparación y grandes dosis de sangre fría para salir bien parado.

«Es como un examen oral en el que tienes enfrente a casi treinta personas que te hacen continuamente preguntas y comentarios, a veces cáusticamente, a los que no sabes qué responder», recuerda.

«Cuando yo les decía que teníamos tal o cual garantía financiera o política, ellos contestaban: 'Eso lo dirá usted. ¿Dónde están los documentos?'. Quieren», advierte, «que todos los compromisos estén por escrito. Si no, los ponen en duda. Los acuerdos parlamentarios, las expropiaciones de terrenos, las recalificaciones, las compromisos de los patrocinadores..., sólo se los creen si ven las cartas correspondientes».

Moreno de la Cova dijo a EFE que si tuviera que vivir otra vez la experiencia, se pasaría «semanas ensayando» para llegar al momento decisivo con más confianza.

«Yo pondría enfrente de una mesa a treinta tíos con muy mala leche para que me hicieran las preguntas difíciles. Es fundamental», subrayó, «que el que defiende cada tema se lo sepa al dedillo. Desde luego, si les cuentas alguno milonga te pillan inmediatamente, porque vienen muy preparados». Recuerda que la llegada del COI a Sevilla coincidió con unos días de lluvia, lo que alteró sensiblemente sus planes de la candidatura.

«Tuvimos la mala suerte de que llovió y no pudimos sobrevolar en helicóptero las instalaciones, como teníamos previsto», apuntó.

Pese a que el programa de la visita está cerrado hace tiempo, Moreno de la Cova insistió en que sus miembros «improvisan muchísimo, así que la candidatura de Madrid debe estar preparada para todo».

«Hay temas que parecen muy importantes y por los que pasan por encima, quizá porque ven precisamente que los llevas muy preparados. Así nos sucedió en Sevilla», comentó, «con el capítulo medioambiental, que venía avalado por Greenpeace. Ellos insisten en donde ven más debilidades. Depende de las ganas que tengan de fastidiar».

El que fue responsable de la candidatura sevillana cree que, en su caso, los enviados del COI «llegaban ya con la idea preconcebida de que sólo podían pasar cuatro o cinco ciudades y que debían ser muy duros».