TW
0

Ha nacido el Alcúdia-Aracena. Las negociaciones mantenidas entre los máximos mandatarios de ambos clubes han fructificado y, a expensas de concretar los últimos flecos, la operación por la que la entidad mallorquina ocupará la plaza en LEB-2 del Aracena se cerrará de manera definitiva. En la jornada de ayer, Miquel Ramis y Julio Gálvez, presidentes de Alcúdia y Aracena, respectivamente, mantuvieron un nuevo contacto en el que se perfilaron los puntos clave de un proyecto que arranca con las miras puestas en el ascenso a la LEB, sin renunciar a un salto a la máxima categoría a medio plazo.

La semana que viene puede presentarse en sociedad la nueva franquicia, que responderá a la denominación de Alcúdia-Aracena, y tendrá su centro de operaciones en la ciudad del Nord de Mallorca, aunque un futuro traslado a Palma sigue siendo una opción que se maneja. La oferta del Alcúdia era la más atractiva de las que manejaba Julio Gálvez, quien tiene claro que «la idea es estar poco tiempo en LEB-2. Si algo me ha convencido del proyecto del Alcúdia es su seriedad y las ganas que tienen de hacer cosas importantes. El fichaje de Carmelo Cabrera es un aval y toda una garantía que refuerza las intenciones de Miquel Ramis y su equipo de trabajo».

Gálvez admitió que las negociaciones se encuentran en un estado «muy avanzado y se pueden acabar de concretar en breve, creo que en menos de cuarenta y ocho horas, pero no cabe duda de que juntos podremos lograr los objetivos que nos hemos propuesto», explicó Gálvez, que sería uno de los hombres fuertes dentro de la plantilla profesional y trabajaría codo con codo con el recién incorporado director deportivo del Alcúdia, Carmelo Cabrera.