Augusto Fernández celebra el título mundial con sus amigos, en Cheste. | MotoGP

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«Es increíble, todavía no me lo creo...», aseguraba todavía en caliente un sonriente y feliz Augusto Fernández. Acompañado por su padre, el flamante campeón del mundo de Moto2 comparecía tras el protocolo del podio del Gran Premio de la Comunitat Valenciana y después de una carrera en la que lo pasó «mal» al inicio, cuando su rival por la corona, el japonés Ai Ogura se lo puso difícil, hasta su caída en el octavo giro. «He sentido la presión en las primeras vueltas, no he tenido la velocidad de otras veces. Sabía que Alonso (López) y Pedro (Acosta) peleaban por ser 'Rookie del Año', yo quería pasarles e ir a por Ogura, pero era difícil...», confesaba el 37, que cierra «un año inolvidable» con los títulos de pilotos, equipos (Red Bull KTM Ajo) y constructores (Kalex).

Retrasado respecto a Ogura, que buscaba la primera plaza o alejar al balear para tener opciones de título, Augusto se sintió aliviado cuando en el octavo giro se fue al suelo el japonés. «Cuando se cayó, quería acabar ganando. Lo siento mucho por él (Ogura), ha sido un gran rival, pero con esa situación de carrera, me quedé más tranquilo, sabiendo que ya era campeón pasara lo que pasara», proseguía el de Sencelles. Eso sí, quería más «y empujé para ganar, pero Pedro (Acosta) hizo una gran carrera y al final conseguimos también ganar por equipos».

«Esas primeras ocho vueltas fueron horribles... El ritmo no era el que estamos acostumbrados y no quería ir a por Pedro (Acosta) y Alonso (López) porque podía correr riesgos. Pero después me he soltado, ya me daba igual todo, me centré en la carrera e intenté ir a por la victoria», sabiendo que delante tenía a un Pedro Acosta intratable durante todo el fin de semana. «Le hemos apretado al máximo, pero él iba también a ganar», añade, recordando de nuevo ese inicio de Gran Premio en el que «yendo segundo Ogura y yo quinto, iba al límite. Pensaba que pasar a Pedro y Alonso iba a ser un riesgo... Pero tras la caída de Ai, pude liberar la cabeza y disfrutar de la carrera», significó.

Admitió a la vez Fernández que ese desenlace fue radicalmente opuesto a lo que pudo ser. Más allá de su caída en Australia, «donde todavía tenía dos carreras de margen», para el balear fue clave Malasia. «Creo que ha sido el punto de inflexión. Fue la carrera más dura para mí. Ogura luchó para ganar y fue mi mejor final visto lo visto», reflexionaba, emocionado por la fuerza del momento.

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Y quiso tener un recuerdo especial para los suyos en un momento así. «Me siento muy orgulloso de mi familia y de cómo me han ayudado a ser campeón del mundo. Siempre me ayudaron, estuvieron ahí y sólo puedo tener palabras de agradecimiento hacia ellos; mi padre, mi madre, mi hermano... y mis amigos que han estado aquí para vivir este momento juntos», recordaba con una sonrisa. Recordando especialmente esa celebración en la que se fue hacia la grada verde, donde estaban los suyos. «He intentado saltarla (la valla), y me he cansado más en la celebración que en la carrera. Son mis amigos, mi hermano, mi madre... Me he sentido feliz por hacerles partícipes de esta celebración y este momento y espero verles para celebrarlo cómo toca».

También señaló a su equipo y a Aki Ajo, el patrón del Red Bull KTM, «porque siempre me han ayudado, incluso en los momentos más difíciles. Creyeron en mí en todo momento, incluso cuando estábamos lejos. Me dieron la confianza necesaria y en Le Mans empecé a crecer tras dos años difíciles. Desde ahí encadené buenos resultados y victorias hasta este punto», manifestaba Augusto en su despedida de Moto2.

Porque el martes se abre una nueva etapa para el 37 en MotoGP, con el GasGas Factory Tech3. «Estoy feliz de acabar así Moto2 y ahora damos otro paso al frente. Estoy preparado para ello y lo que tengo son ganas de aprender con un gran equipo. Estoy listo para cumplir otro sueño», afirmaba ilusionado ante el reto de la cilindrada reina.

Aunque el camino no ha sido fácil, siendo una singladura diferente, sin pasar por Moto3 y entrando en la categoría intermedia de manera directa. Y lo recuerda en un día especial «porque no las tuve todas conmigo siempre. Luché por entrar, íbamos carrera a carrera... Nunca dudamos de mi potencial y hemos sabido luchar en todo momento», finalizó, antes de seguir con su larga lista de compromisos.