La foto oficial de la parrilla de MotoGP sobre el asfalto del circuito catarí de Losail tuvo un mensaje reivindicativo por la paz. El defensor del título de la categoría reina Fabio Quartararo ocupó el lugar central de la primera fila y a su izquierda estuvo el campeón del mundo de 2020, el mallorquín Joan Mir. | IBRAHEEM AL OMARI

TW
0

Semáforo verde a una temporada que vuelve a ser histórica para el motociclismo balear. De nuevo cuatro pilotos isleños peleará por el cetro en sus respectivas cilindradas y la punta de lanza de Joan Mir, que intentará reeditar el título de MotoGP con Suzuki y alargar su leyenda en una campaña de veintiún Grandes Premios y en la que Fabio Quartararo (Yamaha) será el rival a batir y el regreso de Marc Márquez (Repsol Honda) centrará muchas miradas en un estreno plagado de alicientes y en el que las Ducati intentarán rubricar el gran final del pasado ejercicio. A Mir volverán a escoltarle otros tres mallorquines que parten como referentes en sus respectivas cilindradas. Augusto Fernández (Red Bull KTM Ajo), Izan Guevara (Aspar Team Gas Gas) y Miquel Pons (LCR E-Team) completan la parrilla balear en una temporada que deparará emociones fuertes.

Tras un ejercicio marcado por las limitaciones de motor, Mir logró alcanzar el tercer peldaño del podio en 2021. A expensas de cerrar su renovación con la fábrica de Hamamatsu, el piloto mallorquín llega motivado por las mejoras técnicas en su máquina y el aliciente de volver a luchar por ser el mejor del planeta, reivindicándose como un referente del presente y el futuro de la categoría reina del motociclismo de velocidad.

Bagnaia y Miller, al frente de las Ducati, se plantean como firmes alternativas visto lo visto en la recta final de 2021, aunque el potencial de Yamaha, con Quartararo al frente, resulta temible, de la misma manera que la vuelta del multicampeón Marc Márquez está rodeada de interrogantes tras los problemas que le han lastrado a lo largo de los últimos meses. Honda fía todas sus expectativas a la moto número 93, capaz de lo mejor, pero pendiente de sus sensaciones en un retorno esperado y que tendrá su primer capítulo este domingo en el Circuito de Losail.

Allí, en la noche catarí, la temporada 2022 echará a andar con muchas miradas e ilusiones depositadas en la Suzuki número 36, la referencia de la marca. Será la cuarta temporada de Joan Mir en MotoGP. Con unos registros de entidad y el cartel de permanente favorito, el balear lidera el cuarteto de mallorquines que quieren ser protagonistas del Mundial. Con Álex Rins completa la pareja de ases con la que Suzuki intentará recuperar su espacio de honor.

Cambios

Quien ha cambiado de montura y colores es Augusto Fernández. A los mandos de la máquina de cabecera en Moto2, el piloto de Pina formará junto al vigente campeón mundial de Moto3, Pedro Acosta, la dupla del Red Bull KTM Ajo, un equipo que parte con el título como premisa clara y el mallorquín como firme apuesta, en la que será su sexta temporada en la categoría intermedia, donde espera dar el paso al frente que pueda abrirle las puertas de MotoGP en una temporada clave dentro del mercado, pues el grueso de pilotos de la principal cilindrada acaban contrato.

Quinto en el pasado Mundial, lastrado por un mal arranque, Augusto está ante su momento, con 24 años y dilatada experiencia en el certamen, donde parece agotar su etapa en Moto2, habiendo llamado la atención de estructuras superiores, aunque sigue teniendo margen de crecimiento en una cilindrada que conoce a la perfección, y en la que la lista de rivales impone respeto. Al propio Pedro Acosta cabe unir a Sam Lowes, Jorge Navarro, Marcos Ramírez, Albert Arenas, Aron, Canet... Una larga lista de candidatos y un único campeón por coronar.

Juventud

La dosis de frescura y juventud la aporta un Izan Guevara que en su segunda temporada en Moto3 a las órdenes de Jorge Martínez ‘Aspar’, y con una victoria (Austin, 2021) ya en su palmarés, el palmesano será uno de los agitadores de la cilindrada, en la que también la lista de aspirantes es elevada. Jaume Masiá, Dennis Foggia, Sergio García, Andrea Migno, Denis Öncü o la española Ana Carrasco elevan el nivel de una parrilla en la que la Gas Gas número 28 de Guevara ha mostrado que es capaz de pelear con los mejores, acumulando una experiencia vital para encarar una temporada 2022 en la que el título es un reto personal que el propio piloto ha asumido como suyo, dejando atrás un ilusionante año como ‘rookie’ en el que demostró que, tras su título mundial júnior de Moto3, quería hacer algo importante ante la oportunidad que se le presentaba.

El cuarto elemento del motociclismo balear en el Mundial 2022 será de nuevo el representante en la Copa del Mundo de motos eléctricas, que arrancará en el Gran Premio de España, en el Circuito de Jerez (1 de mayo). Miquel Pons repite experiencia con el equipo LCR, poniendo como aval la victoria lograda el pasado año y su buena adaptación a la moto y la intensidad de las pruebas, lo que le valió la continuidad en la estructura y en el certamen.

Mir, Fernández, Guevara y Pons serán los cuatro argumentos con los que el motociclismo balear tendrá motivos para soñar con algo grande en un Mundial de motociclismo que alza el telón con una cascada de sueños e ilusiones que pasan por volver a tener a un piloto isleño de nuevo en lo más alto. Jorge Lorenzo y Joan Mir tienen ese privilegio, pero el resto de miembros de una generación dorada también sueña con lograr algo grande en un año plagado de motivaciones sobre las dos ruedas.