Augusto Fernández y Miquel Pons quieren volar alto en el Mundial. | Fernando Fernández

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Lanzada la cuenta atrás ante una temporada histórica para el motociclismo balear, dos de sus cuatro pilotos en las parrillas del Mundial de velocidad apuran su estancia en Mallorca para atender compromisos y repasar las sensaciones previas al arranque del curso 2021. Augusto Fernández (Estrella Galicia 0'0 Marc VDS) será la baza isleña en Moto2 y Miquel Pons (LCR E-Team) da el salto a la Copa del Mundo de motos eléctricas amparada por Dorna, y cuyo estreno será en el Gran Premio de España, en Jerez, el 2 de mayo próximo.

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Antes, el 28 de marzo, las tres cilindradas de referencia verán el semáforo verde en Losail, en un Gran Premio de Catar marcado por el ofrecimiento de las autoridades de aquel país a la vacunación de los integrantes del Mundial, algo que Augusto, en la que será su quinta temporada en la categoría intermedia, valora con prudencia y contempla favorablemente, aunque espera confirmación por parte de la organización (Dorna) y las autoridades del país del Golfo Pérsico.

Augusto y Miquel, entrenados por Marc Horrach, dejaron claro que quieren volar alto en 2021. Y la muestra fue su aparición a bordo de un globo de Mallorca Balloons, donde compartieron un rato con la prensa mallorquina en un acto promovido por Garden Hotels y Garden Sports.

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«Hay ganas de empezar», asegura el piloto de la Kalex número 37. Augusto es un veterano ya en la categoría, y de cara al nuevo ejercicio ha decidido cambiar de equipo técnico en su equipo, «pues el año pasado no salieron las cosas como esperábamos y necesitábamos un cambio», dijo al respecto el deportista mallorquín.

Su objetivo será pelear por el título y «estar entre los cinco mejores. Eso es clave para tener opciones, hay que estar delante». De la misma manera, recordó que «habrá días duros y difíciles, en los que habrá que valorar si vale la pena sumar algún punto y no arriesgar para evitar un 'cero'».

Espera Fernández que las lesiones le respeten y apela a «mi experiencia» como argumento para pelear con los mejores, en una cilindrada la de Moto2 «en la que hay mucho nivel, cada año hay más candidatos y aparecen luego pilotos con los que nadie contaba. Gente con experiencia, calidad y jóvenes que vienen empujando fuerte por detrás», añadía Augusto, quien reitera que su meta será «ser regular, aunque sabemos que es un Campeonato largo y hay que tener la cabeza fría», destacaba Fernández, que esta semana ha llevado a cabo tests de pretemporada en Jerez.

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El Mundial 'burbuja' que les espera da seguridad a Augusto, que espera poder «mantener» el calendario fijado y celebra la presencia de cuatro baleares (Mir, Guevara, Pons y Fernández) en las distintas categorías del certamen, «lo que es todo un éxito y hará que la gente se enganche a las carreras, seguro. Ahora tienen más motivos para estar pendientes en Mallorca», reseñó.

Junto a él se ejercita y comparte equipo Miquel Pons, quien a sus 23 años se prepara para ser la baza mallorquina en la Copa del Mundo de MotoE, quien tras un largo periodo de formación en el CEV, el Europeo y el Mundial de Superbikes, recibió la llamada del LCR E-Team, «y no me lo pensé».

Pons destila «ilusión y ganas de empezar» a lomos de una moto más pesada, eléctrica y que requiere de un complejo proceso de recarga en un certamen con menos carreras y centrado en el circuito europeo del Mundial, con pruebas cortas y en el que «hay que aprovechar al máximo las oportunidades y el tiempo», dentro de una competición en la que la duración de las baterías es clave y condiciona sus prestaciones en entrenamientos y carrera.

Tras probar en Jerez su nueva máquina y llevándose consigo a su telemétrico de confianza, sus vibraciones son positivas ante un paso tan importante en su carrera. «De pequeño, es lo que ves por la televisión y poder estar aquí es una ilusión, un sueño hecho realidad y una oportunidad que quiero aprovechar», explicaba Miquel Pons, que lucirá el 71 en su carenado y tiene muy claro que el objetivo inicial es «aprender y, por qué no, pelear por ganar el Campeonato».

Pons será uno de los debutantes en una cilindrada sostenible y en la que destaca «el nivel de muchos pilotos y su experiencia, incluso en MotoGP y Moto2. Ya nos vimos en los tests, pero en carrera será todo diferente, aunque yo tengo claro que voy a salir a por todas en cada Gran Premio», aseveraba el isleño, a las órdenes de Lucio Cecchinello, quien también posee una estructura en la cilindrada reina, con Álex Márquez como piloto de referencia.

Augusto y Miquel apuntan alto y no se ponen límites. Este viernes experimentaron nuevas sensaciones tomando altura en las instalaciones de Mallorca Balloons y ahora quieren volar sobre sus motos e ilusionar a una afición isleña que tiene dos buenos motivos para estar pendientes de las carreras de Moto2 y MotoE.