Imágenes de la llegada al Aeropuerto de Palma. | Youtube Ultima Hora

TW
2

Aplausos, abrazos, multitud de felicitaciones y el manteo de sus amigos han dado este lunes una bienvenida de oro al flamante medallista olímpico Marcus Cooper Walz, que con una sonrisa de oreja a oreja lucía la medalla de plata conquistada con el K4 500 en los Juegos de Tokio 2020.

Familiares y amigos del Real Club Náutico de Portopetro esperaban en el aeropuerto al piragüista, que, pese al cansancio del largo desplazamiento desde Tokio, recibió muy feliz el cariño de los suyos después de tanto tiempo alejado de casa y dejó constancia de su deseo de disfrutar estos días con ellos de otra brillante muesta en su historial.

«Esta medalla es más especial que la de Río porque la hemos conseguido en equipo», aseguraba mientras toqueteaba la presea y asimilaba la emoción de una bienvenida que había superado las expectativas. «Por los grupos de Whatsapp intuía que se estaba preparando algo, pero mi madre también me ha intentado confundir un poco diciéndome que no había nadie fuera y ha sido muy bonito encontrar a tanta gente del club, a la familia y a los amigos», decía fuera de la terminal de llegadas de Son Sant Joan.

Los rostros de los más pequeños del club bien valían la alegría de Marcus Cooper Walz, que recibió las felicitaciones del director general d’Esports del Govern, Carles Gonyalons, y la alcaldesa de Santanyí, Maria Pons. El vicepresidente del Real Club Náutico de Portopetro, Jaume Rigo, y el vocal de piragüismo, Miquel Bordoy, junto a representantes de la federación balear también contribuyeron a la emotiva bienvenida al subcampeón olímpico. «Ahora en París toca una de bronce», bromeaba Marcus sobre la posibilidad de completar un palmarés que ya le ha situado en el selecto club de deportistas mallorquines que han conseguido más de una medalla en los Juegos Olímpicos.

La presea de plata conseguida en el Canal Sea Forest de la capital nipona une el nombre del piragüista al de Rafael Nadal, que se colgó el oro individual en Pekín en 2008 y el de dobles junto a Marc López en Río 2016. Aún por encima en este particular palmarés quedan Joan Llaneras con sus dos oros en puntuación (Sydney 2000 y Pekín 2008), además de la plata en esa modalidad en Atenas 2004 y ese idéntico metal en la Madison junto a Toni Tauler y Rudy Fernández, que ha subido hasta en tres ocasiones al podio olímico merced a sus dos platas en Pekín y Londres y un bronce en Río 2016.