Imagen de la celebración del Constància tras lograr el ascenso a la División de Honor juvenil tras el partido disputado este domingo en Inca. | Emilio Queirolo

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El Constància ha tenido que esperar hasta la última jornada de liga para lograr el ascenso a División de Honor y compartir la temporada que viene grupo con el Mallorca y San Francisco. El club de Inca añade brillo al año de su Centenario dando el salto a la máxima categoría del panorama nacional dejando a las puertas a un Manacor que se ha quedado con la miel en los labios después de hacer también una excelente temporada. El conjunto blanquinegro sube pese a ser segundo de la tabla, ya que el Mallorca B no puede subir al tener ya los bermellones al primer equipo en la liga.

Desde el arranque del choque el Constància sabía que lo único que necesitaba si quería subir y no depender de otros  era  ganar, y salió decidido desde el pitido inicial. Desde el minuto uno puso cerco a la meta del Atlético Rafal y comenzaron a llegar las ocasiones de gol hasta que a los quince minutos de juego Caballol ponía por delante a los blanquinegros y desataba el éxtasis llegaba a las gradas y al banquillo local.

El Constància quería más y no sufrir ningún susto inoportuno del equipo de la barriada de Palma, así que mantuvo la intensidad y superada la media hora ha logrado poner más tierra de por medio en el marcador con un nuevo gol de Pomares. El tanto suponía la tranquilidad para el equipo local, que antes de llegar al descanso ha dejado el partido casi sentenciado con un tercer gol por mediación de Payeras.

Los locales habían cumplido con su parte en los primeros 45 minutos y nada más comenzar la segunda mitad el entrenador local, Sergio Sanz, ha introducido cambios para refrescar al equipo. Las manecillas del reloj corrían a favor del Constància, aunque a los 65 minutos de juego tuvo un pequeño sobresalto al marcar Ramón el gol visitante que añadía algo de emoción al desenlace.

Al Constància no le ha podido la tensión y ha seguido buscando su oportunidad para cerrar definitivamente el partido. La sentencia ha llegado gracias a Pérez, que había entrado por Ribas en la segunda mitad. El cuarto gol local ya liberada a todos para empezar a festejar el merecido ascenso a la División de Honor tras un curso muy exigente. El Rafal ha hecho su partido, pero se ha topado con la solidez de un rival digno merecedor del salto a la máxima categoría del fútbol juvenil, donde Inca no tenía un representante desde la temporada 2010-11.

4 - Constància: Morillas, Cifre, Planas, Payeras (Tapia), Bonnín, Durán (Rosselló), Pomares (Arrom), Caballol (Marzovillo), Giaquinto, Ribas (Pérez) y Llabrés.

1 - Atlético Rafal: Lucha, De Codina (Vecina), Martínez (Ribot), Núñez, Alonso, Gómez (González), Martín, Pizá (Carrasco), Rocca, Bustamante y Ramón.

Goles: 1-0, Caballol, min. 15; 2-0, Pomares, min. 36; 3-0, Payeras, min. 45; 3-1, Ramón de penalti, min. 65; 4-1, Pérez, min. 75.

Árbitro: Juan Vega Martín. Ha amonestado con cartulina amarilla al jugador visitante Martínez.