El incidente se produjo a falta de dos minutos para la finalización del encuentro entre el Madre Alberta y el Consell, que finalizó 4-2 para los palmesanos, cuando una acción de Almarche, de tan solo 24 años de edad, encendió los ánimos del entrenador del Consell. «En un lance un jugador del Consell se cayó al suelo y en la contra marcó el equipo rival. Yo había visto que el niño se había levantado y por eso no detuve el juego. Entonces, el técnico del Consell me lo recriminó de forma vehemente. Comenzó a chillarme y le expulsé. Se encaró conmigo y yo reculé. De repente me propinó un cabezazo en la frente», señala a este periódico el árbitro.
Después de ese incidente, los niños comenzaron a llorar. El colegiado optó por no detener el partido ya que apenas quedaban dos minutos. «No suspendí el encuentro por los niños y por la respuesta del público. Ellos nos animaron a seguir con sus aplausos». Se da la circunstancia que el entrenador del Consell es padre de uno de los jugadores del equipo. A pesar de que han transcurrido más de 48 horas, nadie del club ha llamado al colegiado para disculparse. «Los propios ayudantes del entrenador sí que me dijeron que no eran partidario de la forma de actuar de su técnico y que tendría todo su apoyo. Del Consell no me ha llamado nadie para interesarse por mi estado ni para disculparse. Ni el entrenador ni el presidente».
Una vez finalizado el partido, el colegiado se dirigió al hospital y posteriormente a la comisaria para interponer una denuncia contra el presunto agresor. El parte se refiere a «una contusión frontal fruto de una agresión en un partido de fútbol».
Colegiado desde los 16 años y exjugador de La Salle y Patronato, Vicente Almarche seguirá arbitrando a pesar del incidente porque es «mi vida y lo que me hace feliz». El árbitro reconoce que la magnitud de los insultos ha descendido desde la normativa creada a raíz del 'caso Alaró' pero que la violencia «por desgracia no se ha erradicado del todo».
Vicente Almarche considera que la reacción del entrenador del Consell no tiene justificación posible. «Estamos hablando de un partido de niños de 6 años, en el cual estaba jugando su propio hijo. Lo único que quieren es disfrutar y ser felices. Eso no es un buen ejemplo para nadie».
10 comentarios
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Estuve viendo los 2 partidos de semifinales. En relación al incidente ocurrido, de apenas 1 minuto que no tenía que haber ocurrido, la actuación del entrenador no admite excusas, entrar en el campo, encararse los dos frente a frente a una distancia corta que termina en cabezazo, y ninguno de los 2 estuvo callado. El crío siguió tendido en el césped hasta después dematerializarse el gol. El árbitro tuvo palabras hacia el entrenador: "No volverás a entrenar". El entrenador se retiró al vestuario y no tuvo que intervenir nadie. Los niños si lloraron al finalizar el partido de impotencia y por algunos golpes recibidos. Puedo confirmar que el entrenador le pidió disculpas delante de testigos. Posteriormente dirigió la otra semifinal y en el descanso se le vio departiendo con otras personas en el campo, no se le observaba síntomas de mareo. Ojalá, existiera un vídeo que reflejará este incidente.
estuve muchos años acompañando a mis hijos a futbol y me hace gracia el articulo cuando dice " se da la circunstancia que en el equipo juega el hijo del entrenador " ja, ja ja, eso es lo habitual, por desgracia, ademas como extra la mayoría de veces y lo se por experiencia, ni siquiera llegaban a pagar la cuota como los demás jugadores , eso si , titulares indiscutibles, buenas tardes y espero que algún día estos casos no pasen , una vergüenza y una mala enseñanza para los niños.
Normalmente sois los papis los que necesitáis vigilancia... Viva el fútbol y sus valores de mi....da
El comité de competición debería inhabilitar a este deficiente mental de por vida (con todos mis respetos hacia los deficientes mentales). Si lo hizo en la categoría pre-benjamin, delante de niños de 6 años, ¿qué hará cuando entrene en categoría cadete? Y lamentable es que nadie de la directiva del club se haya puesto en contacto con este árbitro para disculparse. Tengo a mi hijo que juega en esta categoría (pre-benjamin), y lo último que deseo sería ver un espectáculo dantesco de semejante calibre. Por favor!!!
Soc entrenador nivell 2 i fa uns anys vaig entrenar un grup de prebenjamis, vaig quedar asustat del que veia, entrenadors mandant als nins a presionar la treta de porta, alguns celebrant els gols mes que els nins i d'altres obligant a celebrar els gols amb l'entrenador. Es una vergonya veure com a alguns clubs deixen entrenar a qualsevol, l'edat de prebenjamí es una etapa purament formativa, quan l'objectiu d'un entrenador de prebenjamins es guanyar pasen aquestes coses, nins de 6 i 7 anys varen haver de presenciar aquest espectacle grotesc i la cupa es del club per deixar en males mans a nens d'etapes formatives. Cal dir que la FFIB també te part de cupa promocionant taules de goleadors (que enguany varen eliminar a la mitja volta) i fent fases "finals" d'aquesta etapa
Qué tiempos aquellos en que el deporte era sano. Hoy días es un reflejo más de la sociedad :brutos, incapaces de asumir un simple revés del contrario.
@Loloszet a ver. A parte que el agresor es de Ciutat (búscalo, su nombre está en el artículo) llevo años yendo por todos los campos de Mallorca y, sin ninguna duda, los más broncas no están en la Part Forana. Te recomiendo ir a ver partidos de futbol base en La Soledad, Indioteria, Genova, etc, etc. Así que menos tirar de estereotipos sobre la Part Forana.
Fútbol en estado puro.
Los padres tenemos que vigilar qué tipo de entrenadores tienen nuestros hijos. Con lo que los clubes piden de cuotas y con lo que subvencionan los ayuntamientos, qué mínimo que exigir entrenadores titulados y capacitados. No cualquier macarra de barrio.
Siempre la part forana....