Un desastroso Hércules salva un punto ante un Girona que perdonó

Hércules: Aulestia, Juanma Ortiz, Pamarot, Echaide, Peña (De Lucas, m.18) (Portillo, m.45), Yuste, Font (Sugi, m.62), Javi Hervás, Sissoko, Ferreiro y Eldin.

Girona: Becerra; Iván López, Ramalho, Richy (Tato, m.85), Migue, Juanlu, Matamala, Timor (Jandro, m.77), Eloi, Gerard Bordás (Carmona, m.64) y Ortuño.

Árbitro: Sagués Oscoz (Colegio Vasco). Amonestó a Echaide, Pamarot y Portillo, por el Hércules, a Carmona, por el Girona. Expulsó por doble amonestación a Javi Hervás, en el minuto 78.

Hércules y Girona han empatado sin goles en un partido en el que los locales, que acabaron en inferioridad numérica, fueron un equipo sin ideas ni ambición, mientras que los catalanes mostraron una alarmante falta de puntería y perdonaron en exceso en la segunda mitad.

El punto sirve de poco para Hércules y Girona en su lucha por lograr la permanencia, aunque resulta especialmente escaso para el cuadro visitante, que hizo muchos méritos para llevarse la victoria.

El Hércules fue el equipo que llevó el peso del partido en los primeros 45 minutos, aunque su dominio fue estéril y sin presencia en el área del rival, en gran parte por la decisión de su técnico Quique Hernández de apostar por una alineación sin un delantero puro.

Un centro chut de Ferreiro que no encontró rematador a los ocho minutos fue lo más cerca que uno de los dos equipos estuvo de marcar en una primera mitad insulsa, en la que lo más reseñable fue la lesión del lateral izquierdo alicantino Paco Peña, que fue sustituido por De Lucas.

Fue una primera mitad en la que el Hércules quería pero ni podía ni sabía, mientras el Girona parecía conformarse con un empate pese a su necesidad de victoria para alimentar sus opciones de permanencia.

El conjunto gerundense tuvo en un disparo desde la frontal del área de Ortuño (m.23) su mejor ocasión, pero el balón no fue entre los tres palos de la portería alicantina, que hoy defendía Oinatz Aulestia en sustitución del titular habitual, Ismael Falcón, que no se vistió finalmente tras haber sido padre de gemelos.

En el descanso, el Hércules realizó su segundo sustitución al dar entrada a Portillo por De Lucas, aunque lo que realmente cambió fue la mentalidad con la que el Girona reanudó el choque.

Apenas había pasado un minuto cuando el meta Isaac Becerra evitaba el gol del Hércules en un mano a mano con Ferreiro. Pero, pese a esta ocasión inicial, fue el Girona el que empezó a acercarse con verdadero peligro al área alicantina.

En menos de un cuarto de hora, Ortuño y Gerard Bordás se plantaron solos ante Aulestia, que evitó el tanto visitante con dos grandes intervenciones.

El Girona siguió dominando y acercándose con peligro a la meta alicantina, beneficiado en muchas ocasiones por errores graves del Hércules en la circulación del balón. Carmona y Ortuño volvieron a probar fortuna desde la corona del área, pero con el punto de mira algo desviado.

Fueron pasando los minutos y el Girona mantenía un dominio que acrecentó después de que el Hércules se quedara en inferioridad numérica por la expulsión por doble tarjeta de Javi Hervás, tras golpear un balón con la mano.

Pero el marcador no se movería, en gran medida, por la falta de puntería de un Girona que, con el tiempo ya cumplido, estrelló un balón en el larguero por medio de Jandro.