Joan Laporta dejará de ser presidente del FC Barcelona en menos de mes y medio. | Andreu Dalmau

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El presidente del Barca, Joan Laporta, ha asegurado que no puede «adelantar nada» sobre el estado de las negociaciones para contratar al valencianista David Villa y al centrocampista Cesc Fabregas (Arsenal), dos operaciones que parecen bien encaminadas.

«No puedo adelantar nada porque lo relativo a los fichajes y a las bajas está en proceso y tengo que ser prudente», ha asegurado el dirigente barcelonista, en unas declaraciones a Efe.

Una vez finalizada la temporada y con las elecciones a la vuelta de la esquina, Laporta ha explicado que «el Barca no se para por responsabilidad» y la suya es guiar los destinos del club hasta el 30 de junio, fecha en la que expira su mandato.

Ha recordado el presidente del Barca «la unanimidad» existente en el barcelonismo en torno a la figura del entrenador azulgrana, Pep Guardiola.

«Tengo la tranquilidad de que las decisiones deportivas que estamos tomando están totalmente consensuadas con Pep Guardiola y tengo entendido que todos los candidatos quieren que Pep siga, por eso actuamos en consecuencia para preparar la próxima temporada, para ejecutar las decisiones que habíamos pensado para la próxima temporada», ha insistido.

En todo caso, Laporta ha asegurado que «para los intereses del Barca», este tipo de decisiones de futuro «se tendrían que adoptar antes del inicio del Mundial» de Sudáfrica.

Por eso, el dirigente desea que antes de la cita electoral (13 de junio) se haya concretado la composición de la plantilla. «Las incorporaciones importantes que tenemos previstas hacer se harán antes de un mes, lo que no me puedo es poner en la piel de los candidatos si tienen previsto realizar alguna precontratación con algún jugador», ha agregado.

Intereses

Laporta ha destacado que «siempre hay que pensar en los intereses del Barca». En el caso de los aspirantes «tienen que ser muy cautelosos» y ha recordado que algunos de ellos «ya tienen cierta experiencia para no perjudicar las gestiones que se estén haciendo».

Después de asegurar que le gustaría que el secretario técnico Txiki Begiristain continuara en su puesto la próxima temporada, Laporta ha comentado que el club «no está obligado» a vender a ningún jugador para acometer las contrataciones.

«Si decidimos vender será porque desde el punto de vista técnico se ha decidido traspasar a algún jugador, pero el club está fuerte económicamente y en este sentido podemos hacer frente a este tipo de operaciones», ha indicado.

En cuanto a Touré Yayá, Laporta se ha declarado «un fan» del jugador y no ha querido referirse a las declaraciones del representante del marfileño, quien reclamaba mayor protagonismo para el africano.

«Para mí es un jugador polivalente, de esos que el Barca necesita siempre. Como medio es de los mejores del mundo y es un orgullo tenerlo en la plantilla. Las circunstancias que apunta su representante están ahí y en este momento será cuando los técnicos y el jugador lo tendrán que evaluar», ha dicho.

También ha hablado sobre la temporada firmada por el sueco Zlatan Ibrahimovic, «un jugador con una experiencia contrastada» que «ha demostrado su gran calidad» en el Barca.

Laporta ha admitido que el delantero no ha tenido la constancia deseada y lo ha justificado en las lesiones que ha sufrido desde su llegada.

«Además, es difícil jugar en el Barca y más de delantero centro. Requiere un período de adaptación. No sé qué pasa por la cabeza de los técnicos respecto a este jugador, pero creo que puede aportar mucho», ha insistido.