Los integrantes de la selección balear de lucha posan con los responsables del equipo, Eusebio Capel y Vicente Lillo, y con las medallas conseguidas.

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La lucha balear conserva sus brillantes credenciales a escala estatal, y la mejor muestra de ello fue el brillante papel de nuestros representantes en los Campeonatos de España celebrados en Murcia, un buen test en la carrera hacia los Juegos de Londres.

El equipo capitaneado por Eusebio Capel y Vicente Lillo regresó a la isla con dieciséis medallas al cuello y muy buenas sensaciones. Diez medallas de trece posibles en séniors, tres de cuatro en cadetes y otras tres por clubes evidencian el buen trabajo que se desarrolla en las islas, aunque por federaciones no se pudo subir al podio ni en libre ni en grecorromana -en ambas se acabó en cuarta plaza-, en buena medida por las bajas y problemas físicos que arrastraba la selección.

La competición en libre olímpica dejó el oro de Fran Sánchez (55 kilos), las platas de Agustín Sánchez (60) y Manolo Ortiz (66), el bronce de Toni Cabot (84) y la quinta plaza de Agustín López (74). En féminas, Sara Sánchez (48 kilos) y María del Mar Serrano (51) no fallaron, colgándose un nuevo oro, mientras que Claudia Fornés obtuvo la plata en 72 kilos. Destacó la ausencia por lesión de Karima Sánchez. En grecorromana, Ismael Navarro (66) se hizo con el título, destacando las platas de Juanjo Ruiz (74) y Juanjo González (84), además del quinto de Andoni Durán (60). Por clubes, el Budokán fue plata en libre olímpica y femenina y bronce en grecorromana.

Mención notable para los cadetes, con el oro de Sergio Galera (58 kilos, grecorromana) y los bronces de Carlos Lomba (LO, 58) y Juanma Medina (85), además del quinto puesto de Agustín Castillo (63 kilos).