Toni Vicens lanza a canasta ante la oposición de un rival. | Jaume Morey

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El Bàsquet Mallorca adivina algo de luz al final del túnel. Las gestiones del alcalde de Inca, Rafael Torres, permitieron ayer multiplicar el valor de la reunión que mantuvieron los dirigentes del club con los representantes de la entidad bancaria con la que se negocia la obtención de liquidez procedente de la subvención municipal aprobada el pasado mes de septiembre. El presidente del Bàsquet Mallorca, Antoni Ramis, asegura que «el club está en disposición de cumplir con la documentación y los requisitos que han sido requeridos» y confía en «solucionar lo antes posible» una situación que ha llevado al límite al proyecto mallorquín en la LEB Plata.

La reunión celebrada ayer por la mañana ha supuesto «un principio de acuerdo» para desbloquear el cobro de 312.000 euros que concederían la liquidez necesaria para poner en marcha la campaña. El club tenía que percibir 78.000 euros anuales hasta 2015 del Ajuntament d'Inca, pero ha abogado por unificar la ayuda municipal para aliviar su maltrecha situación y llegar a principios de 2011, cuando la entidad ingresará ayudas de otras instituciones que le concederían viabilidad. Ramis advierte que «no será fácil, pero por nuestra parte estamos en disposición de cumplir con lo que se nos exige por parte del banco».

El máximo responsable del club habla «a diario» con la plantilla y resalta que «no escondemos que hay problemas, pero la verdad es que hay un gran compromiso por parte de los jugadores y el cuerpo técnico, de lo contrario no tendríamos un balance de 5-0».

Después de dos meses de competición, las alarmas se han encendido en el Palau d'Esports d'Inca, donde las penurias económicas ya quedaron al descubierto al final de la pasada campaña y con la pérdida de la categoría en los despachos durante el verano. La falta de liquidez ha marcado el comienzo de la temporada propiciando que se adeuden las dos primeras nóminas del ejercicio 2010-11, aunque también preocupa especialmente el hecho de que el club no sepa si dispondrá de recursos económicos para desplazarse a Gipuzkoa el miércoles 17 con motivo de la octava jornada de la liga.

Clave

El consistorio de la capital de es raiguer ha acudido de nuevo al rescate del Mallorca para interceder en esta ocasión con la entidad bancaria con la que se negocia la obtención de liquidez. El responsable del departamento d'Esports, Felip Jerez, expresó ayer la intención del consistorio de respaldar al club y valoró que «desde el Ajuntament, siempre dentro de nuestras posibilidades, haremos todo lo que esté a nuestro alcance para ayudar».

Cabe destacar que la subvención de 78.000 euros anuales hasta 2015 aprobada el pasado mes de septiembre se convirtió en la tercera operación de rescate del Ajuntament d'Inca, ya que en 2007 comprometió las subvenciones de los siguientes cuatro años incluyendo la de este año y el próximo, mientras que en 2008 el consistorio ejerció de avalista en un préstamo de 200.000 euros del que tuvo que hacerse cargo.