El primer partido en casa del 2023 suponía para el Fibwi una buena oportunidad para detener la hemorragia de las últimas jornadas, aunque a la escuadra local le costó mucho marcar el territorio y las distancias. Después de un primer tiempo muy desacertado en ataque —el equipo llegó al descanso con solo 27 puntos en su casillero y una desventaja de nueve—, los mejores momentos del duelo para los baleares llegaron durante el tercer cuarto. El quinteto isleño se fue quitando de encima la presión y le asestó un golpe al encuentro que iba a resultar definitivo para el desenlace. Una antideportiva bien aprovechada por Anyeuri Castillo y un triple del dominicano justo después dejaban tocados a los castellonenses, que además de llegar también en un momento delicado de la campaña se adentraban en el parcial decisivo cargados de dudas y con todo por hacer (55-48).
El Fibwi Palma supo gestionar con inteligencia su ventaja durante los últimos diez minutos y le hizo un nudo al marcador gracias a su intensidad defensiva. El acierto exterior de Viktor Kovaceciv mantenía tensa la cuerda (60-50) y cuando los visitantes hacían amargo de incorporarse Pau Tomàs detenía el duelo para corregir la marcha del mismo (68-59) y ya con el reloj a punto de agotarse y todo bajo control el propio Kovacevic bajaba la persiana con un espectacular mate. El Palma recuperaba el pulso y se aplicaba una inyección de confianza de cara al próximo partido contra el Sant Antoni.
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