Imagen de la plantilla del Fibwi Palma posando sobre el parquet de Son Moix. | R.D.

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«Hay ganas de que llegue el partido para demostrarnos que tenemos que ser uno de los equipos importantes de la liga». Esta frase de Pau Tomàs refleja lo que ha sido una larga semana para el Fibwi Palma, que tras ser arrollado por el Sant Antoni (108-69) regresa a Son Moix este domingo con dos derrotas consecutivas en su casillero -Benicarló y Sant Antoni- que han alterado un inicio agitado pero positivo tras imponerse en el estreno, su único partido como local, al Prat (80-79).

«Los jugadores están con muchas ganas», añadía Pau Tomàs, que confía en el que el duelo ante l’Hospitalet (18 horas, Son Moix) devuelva al Fibwi a la senda del triunfo. Se ven las caras dos clásicos que igualan su balance de victorias y derrotas tras tres jornadas (1-2) y dibujan trayectorias paralelas. Los catalanes ganaron su único partido con apuros al Cornellà (64-63), cayendo de forma clara ante el Prat (97-71) y cediendo en un intenso duelo con el Benicarló (61-69).

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Los de Xavier Carvajal tienen a Gerard Sevilano como referente estadístico, con Nil Baques o Adrián Rodŕíguez como otras de las amenazas de l’Hospitalet, que llega al Palau con la misma meta que persigue un Fibwi atrapado por las dudas tras su holgada derrota en Eivissa, un revés que pretenden enmendar frente a su público, aunque advierte Pau Tomàs que delante tendrán «a un equipo que, si se encuentra cómodo, nos puede crear muchos problemas».

La derrota en Sant Antoni ha dolido y ha sido foco de debate e intercambio de opiniones en las diversas reuniones que ha tenido el equipo a lo largo de la semana. «Ellos son los primeros que no se vieron reflejados en lo que se vio», confiesa el técnico mallorquín, que espera poder observar el acoplamiento de todas las piezas y la mejor versión del Fibwi Palma en un partido de los que marcan un punto de inflexión, aunque estemos a comienzos de la temporada. Será una buena prueba para demostrar si el equipo mallorquín arranca su escalada.