Imagen del Centro Deportivo de Puig d'en Valls. | David Frutos

TW
14

El partido de la Liga Escribano Femenina (Primera División) entre el Puig d'en Valls y el Sant Josep fue suspendido por parte de los colegiados ante la sorpresa de ambos equipos, cuando se llevaba poco más de un minuto disputado del tercer cuarto, y con el marcador de 21-39 a favor de las colegiales. A expensas de lo que decida el Comité de Competición de la Federación Balear de Baloncesto (FBIB), el duelo queda sin poder cerrarse y con la duda de saber si tendrá que reiniciarse o se dará por finalizado, dada la complejidad del traslado entre Mallorca y Eivissa y la falta de fechas disponibles en la recta final de la temporada regular.

Según relatan testigos y fuentes de ambos clubes, tanto PDV como Sant Josep, el foco del problema se inició con la exclusión por parte de la pareja arbitral del técnico local, que fue obligado a abandonar el recinto para que el encuentro pudiera continuar. El choque estuvo parado durante varios minutos hasta que se solventó esa situación y el preparador ibicenco salió de la pista, colocándose fuera de la misma, aunque al otro lado de una puerta que cerraron los colegiados, pero se reabrió posteriormente para ventilar la instalación por razones sanitarias.

Después de varios minutos con el partido parado, el envite se reinició. Y según cuentan testigos presenciales, se produjo un choque entre dos jugadoras, sin consecuencias físicas para ambas, tras lo cual el tándem arbitral decidió abandonar la instalación y suspender el partido, ante alguna protesta del cuadro local por la acción y la sorpresa y el asombro de jugadoras y cuerpo técnico, especialmente de las filas visitantes, un Sant Josep que espera la decisión de Competición para ver cómo debe actuar ante unos hechos insólitos.