Pau Tomàs y Álex Pérez, entrenadores del Palmer Alma Mediterránea Palma. | Melilla Baloncesto

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El partido que este domingo debían disputar en el WiZink Center el Movistar Estudiantes y el Palmer Alma Mediterránea Palma, correspondiente a la jornada veinte de la Liga LEB Oro, ha sido finalmente aplazado a consecuencia de la aparición de tres casos confirmados de COVID en las filas del equipo balear, a los que cabe unir un cuarto positivo del jugador del filial que iba a reforzar al plantel de Álex Pérez y Pau Tomàs. Estudiantes aceptó la propuesta inicial realizada por parte del Bahía San Agustín para posponer la disputa del encuentro, y más tarde la propia Federación Española de Baloncesto (FEB) hizo oficial el cambio de fecha. Así, el Movistar Estudiantes-Palmer Palma se jugará el próximo miércoles 27 de abril, a las 20 horas.

Aunque el protocolo COVID de la Federación Española fija un umbral de cinco casos positivos para aplazar un partido, la falta de efectivos por parte del Palmer, que contaba con siete jugadores más el recién incorporado Pol Figueras -tras superar precisamente el virus- llevó al club mallorquín a solicitar a Estudiantes el cambio de fecha. La histórica entidad madrileña mostró en todo momento su predisposición para más tarde recibir el visto bueno de la FEB para mover la fecha del partido.

El equipo se ejercitará este sábado en el Palau d'Esports de Son Moix, pues el próximo miércoles, 9 de febrero (a las 20:30 horas), y si no hay más casos confirmados de COVID en las próximas horas, tiene previsto jugar el partido aplazado en su día de la jornada 16 de la LEB Oro, en el Palau d'Esports de Son Moix y frente al ICG Força Lleida. Volver a ganar tras romper su mala racha frente al Melilla es el objetivo prioritario del Palmer Alma Mediterránea Palma en su carrera desesperada por la permanencia en la categoría.