Félix Alonso da instrucciones a sus jugadores durante un tiempo muerto. | Teresa Ayuga

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La dolorosa derrota en Valladolid ha tenido consecuencias más allá de lo meramente deportivo. Quedarse lejos del ascenso directo a la Liga ACB, objetivo trazado de inicio por el B the travel brand Mallorca Palma, ha obligado a la entidad a hacer números y variar su libro de ruta. No subir por la vía rápida llevaría consigo un coste extra (nóminas, pisos, viajes...) que afectaría al actual presupuesto del equipo de LEB Oro -que ronda los 1’5 millones de euros en total-, para cuyo cumplimiento y dado el nuevo escenario, se han debido adoptar unas primeras medidas de urgencia que podrían tener continuidad durante las próximas semanas.

Con el fin de cuadrar las cuentas, el BTTB se ha tenido que apretar el cinturón con actuaciones superficiales, por el momento, pero que podrían llegar a afectar a la plantilla profesional en caso de ser necesario. No en vano, se ha puesto sobre la mesa la opción de prescindir de dos jugadores cuyo rendimiento no esté a la altura, pero desde el cuerpo técnico y la dirección deportiva se descarta, por el momento, esta opción. Eso sí, si se actúa se debería hacer antes de que acabe febrero.

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Estos ajustes económicos se iniciaron durante la jornada de ayer. Una de las primeras acciones fue la de poner fin a la relación profesional con la responsable de comunicación, cuyas funciones asumirá parte del personal que queda en el club. De la misma manera, se recortarán gastos en los desplazamientos del equipo de LEB Oro al no viajar ya desde este momento ni el gerente, Jordi Riera, ni el preparador físico, Peter Hoffmann. Una medida que no es nueva, pero que se une al catálogo de intervenciones que pretenden reducir la nómina de gastos. Todas estas medidas han sido consensuadas por los diferentes estamentos encargados de la gestión del proyecto, que encabezan Gabriel Subías y Guillem Boscana.

El alto coste del plantel profesional es un hándicap. Félix Alonso y Jordi Riera no consideran oportuno cortar a ninguno de los doce jugadores del primer equipo, pero desde el club no descartan la necesidad de intervenir en ese área para reducir la elevada parcela de gastos, que se pretende frenar para evitar un agujero en la tesorería a final de temporada.