Álex Hernández intenta superar la defensa de dos jugadores del Alicante. | Emilio Queirolo

TW
4

Son Moix vivió otra decepción, otra oportunidad perdida en la carrera por el ascenso. Una nueva derrota, tal vez la más dolorosa, en un partido en el que el B the travel brand Mallorca Palma no estuvo a la altura, no demostró ser una de las mejores defensas de la LEB Oro. Pero el HLA Alicante sí dio muestras de ser uno de los ataques más fiables de la competición. La cuarta derrota en el Palau (63-78) supone desaprovechar el tropiezo del líder Valladolid en la pista del Melilla y poner en juego buena parte de las esperanzas de ser campeón el próximo domingo en Pisuerga (18 horas).

Estuvo desacertado el BTTB, anárquico por fases, superado en todo momento en el juego interior y desbordado por un rival en el que el mallorquín Pedro Llompart y Pitts espolearon a un Alicante que salió con las ideas claras de inicio. Apretando en defensa, imprimiendo un ritmo que no pudo soportar el equipo de Alonso y apelando a los centímetros de Fall bajo el aro y la buena mano de Schmidt en el arranque para marcar distancias de inicio. Sin apenas tiempo de aterrizar, se vio ocho abajo el B the travel brand (3-11). La intensidad defensiva imprimida por el equipo de Pedro Rivero llevaba a los isleños a forzar tiros incómodos y no poder meter balones a la pintura.

Ausente Tunde Olumuyiwa y con Stainbrook en plena adaptación, tuvieron que asumir el peso Chema González, un Barac en horas bajas y Lindqvist. Intratable Fall (18 puntos y 12 rebotes), ahí jugaba con desventaja el BTTB, errático de cara al aro (17 de 45 en tiros de dos), y especialmente en el triple (5 de 23) y al que sostenían fogonazos de calidad puntuales.

Noticias relacionadas

A su ritmo, al que marcaban Pitts y un Llompart inmenso en la dirección, despegaba el HLA Alicante con un triple de Onwenu (10-22). Bivià y Álex Hernández maquillaban el electrónico para cerrar el primer cuarto ocho abajo (14-22). Stainbrook entraba en acción para intentar paliar la sangría en la pintura. Lo intentó, pero la efervescencia del tándem de directores de juego del Alicante y la confianza de un rival crecido eran un muro demasiado alto para un BTTB sin brújula, en el que Erik Quintela y Álex Hernández no encontraron la manera de hacer jugar al equipo como lo hicieron sus oponentes en una tarde, sencillamente, para olvidar.

Con un toque de fortuna, pero sin bajar un ápice de intensidad, el HLA Alicante alcanzaba el ecuador del duelo con un ligero margen a su favor (35-44). Había margen para la reacción, pero no llegó. Al contrario, pues el inicio del tercer cuarto agrandó la brecha, elevando las diferencias a favor de los visitantes, que contaba con máximas de 18 puntos (38-56 y 40-58). De nuevo Pitts, Llompart y Fall asumían la responsabilidad y encarrilaban una victoria que se escapaba. Un triunfo de enorme valor estratégico en la clasificación para un B the travel brand que respondía con triples de Bertone y Löfberg que de poco servían ante la ausencia de continuidad anotadora.

Doce abajo (53-65) arrancaba el último parcial para el BTTB, al que se le agotaban el tiempo y el margen de maniobra para revertir el desastre, un cuarto tropiezo en Son Moix que se avecinaba vertiginosamente.

Mientras el juego interior del BTTB apenas existía, Fall era surtido por sus exteriores para conservar el margen de seguridad que permitió al Alicante disfrutar de unos últimos minutos plácidos, con el triunfo en el bolsillo ante un rival que confirmó que las vibraciones emitidas ante TAU Castelló y Oviedo no eran algo puntual (63-78).