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El hasta hoy entrenador del Real Madrid, el italiano Ettore Messina, explicó que deja el club por la falta de unión, «sobre todo, fuera de la pista», y que ahora es el momento clave de la temporada en el que «quitarse de en medio pueda ayudar».

Juan Carlos Sánchez, director de la sección de baloncesto del Madrid, agradeció al técnico el año y medio que ha dedicado al equipo y confirmó que Emanuele Molin, ayudante de Messina, se hará cargo del conjunto hasta el final de la temporada.

Sánchez dijo, en la sala de prensa del estadio Santiago Bernabéu a la que acudió también Jorge Valdano, director general del Real Madrid, que no está descartado que Molin siga la temporada que viene e hizo un llamamiento a la unidad de todos. El directivo agradeció a Molin la decisión que había tomado.

Messina negó que los jugadores hayan propiciado su marcha, manifestó que quizás algún día vuelva a entrenar al Real Madrid, «un gran club», y recordó que es la primera vez que deja un equipo con contrato en vigor.

Sánchez y Messina tuvieron palabras de agradecimiento mutuo y el técnico para sus colaboradores, los que están «en la sombra», y para los aficionados que le han apoyado. A los que le han criticado mostró su «respeto».

Sobre la facilidad con la que la sección de baloncesto del Madrid finaliza su relación prematura con los técnicos, Messina declaró: «Eso es interesante. Quizás he tenido la ilusión de niño de poder cambiar algo que personajes de altísimo nivel no habían podido tener. Ahora soy uno más. Estoy en el grupo».

Explicó que su decisión se había gestado durante los últimos 10 días, desde que se clasificaron en la primera posición de su grupo de la Euroliga, y durante y después del encuentro del pasado jueves ante el Montepaschi Siena, en el que llegaron a ir 31 puntos abajo a ocho minutos para el final. Fue el primer encuentro que el Madrid ha perdido, tras 18 victorias, en su nueva cancha de esta temporada, la Caja Mágica.

«Lo que yo he decidido hacer lo hice por una razón muy sencilla: intentar ayudar a conseguir una unión dentro y fuera de la pista, que es absolutamente necesaria para lograr algunos éxitos. El nivel de división había llegado, no dentro, sino, sobre todo, fuera a un nivel bastante peligroso para el equipo», aseguró.

«Ha sido un año y medio difícil porque muchas veces las decisiones tomadas o bien no se han entendido o hemos hecho resultados irregulares pero, al final, yo he pensado estamos aquí, hemos jugado la final de la Copa del Rey, estamos segundos con buena ventaja en la liga, con oportunidad de jugar la final y estamos a punto de jugar un 'play off' y meternos en la 'Final Four' y a punto de conseguir un éxito muy importante», declaró.

Messina agregó que en un club como el Madrid no se valora ser tercero o entrar a jugar un 'play off'. Eso «aquí es poco». «Mejor dejarlo cuando las cosas están bien», indicó.

«El tema de mi relación con la plantilla, yo siempre he tenido una buena relación. Tu puedes tener una relación más difícil cuando intentas empujarle», indicó.

«Ahora está claro que yo he tomado algunas decisiones durante la temporada que tenían un sentido, cuando hablo todo el año de lo importante que es saber competir cada partido todos los días en un mundo donde se pide solo ganar, estoy tratando de poner las cosas en un sentido de realidad», enfatizó.

«He intentado siempre proteger al equipo de la obligación y de la presión de tener siempre que ganar, que para un equipo joven era difícil de soportar y éste es uno de los ejemplos», reveló.

«Al conseguir la primera plaza del «Top 16» el equipo para de jugar, los chicos me han reconocido: «coach», hemos desenchufado, pero tú te estás peleando por ellos y esperas que todos perciban esto y den un pasito más. Esto no se ha hecho (no) por falta de entrega, se ha hecho porque el equipo está creciendo y le falta más madurez», dijo.

El ya ex entrenador del Madrid afirmó: «Espero solo que ahora todo lo que está pasando le dé más cohesión y madurez que es fundamental para todo, para que los grandes equipos lleguen a ser grandes. El equipo tiene un gran potencial y le falta dar este salto. Si esto ocurre yo seré feliz».

«Estoy convencido de que el equipo puede estar en la 'Final Four' y yo estaré allí viéndole jugar. No hay nada más. Lo siento», aseguró, aunque reconoció sobre su relación con sus jugadores que, «en el día a día claro que hay momentos que te enfadas más o aprietas más».

«No quiero hacer heroismos. Yo he dejado año y medio de contrato y la posibilidad de estar en mi décima 'Final Four'. Algo he sacrificado. Podía seguir aquí y esperar. Esperar a que te echen, casi te vas a casa tranquilo. Si hago esto es porque quiero ayudar a unir y no a dividir», subrayó.

Messina también elogió a Molin, al que ha tenido de ayudante la última década en distintos equipos. «Es un excelente profesional. Hemos hablado mucho para saber cómo se encontraba, antes y después del entrenamiento de ayer. Antes que un excelente entrenador, es un gran amigo».

«Ha sido casi un proceso de decisión familiar. El tenía alguna duda, como si yo pudiera pensar que no era correcto seguir y yo le he explicado que para mi es muy buena cosa que se pueda seguir en el proyecto técnico. En 1981 hemos ganado nuestro primer título júnior en Italia», recordó.