Archivo - Una camarera de pisos limpia una de las habitaciones del Hotel Claris, en Barcelona | David Zorrakino - Europa Press - Archivo

TW
1

El Gremi d'Hotels de Barcelona ha asegurado este viernes que el sector «no es un gran consumidor de agua» y ha admitido que la emergencia por sequía les genera preocupación.

En un comunicado, ha destacado que el sector barcelonés está «concienciado e implicado en el consumo responsable y sostenible del agua» y que ha reducido en un 40% su consumo en los últimos siete años.

Ante la sequía, los hoteles dedican «todos sus esfuerzos para adaptarse a estas circunstancias» y se centrarán en garantizar los servicios que necesitan los clientes.

El gremio ha mostrado su apoyo a la Generalitat y ha defendido el «diálogo serio, responsable, constructivo y plenamente realista» para gestionar la emergencia.

En este sentido, ha agradecido las ayudas previstas para el sector para proyectos destinados a reducir el consumo de agua, «que permitirán dar continuidad e impulsar las medidas que los establecimientos hoteleros vienen aplicando desde hace años».