En verano y teniendo el pelo rizado es una aventura continua ya que nunca se nos va a quedar de la misma forma y siempre coincide que no lo llevamos bien en ocasiones importantes. Las personas con el pelo rizado siempre están buscando la manera de controlar los rizos del frizz sin romperlo o dañarlo. El pelo crece bajo la superficie de la piel, cada cabello tiene tres capas: la médula, la corteza o córtex y la cutícula.
Pero la pregunta es, ¿y qué tiene que ver todo esto con la humedad? Se debe a las proteínas del cabello que contienen muchos enlaces químicos permanentes. Sólo los tratamientos como las permanentes o los alisados combaten este fenómeno. Aunque el enlace de hidrógeno siendo natural sí que mantiene las moléculas de proteína a raya. Estas moléculas contienen cargas positivas y negativas en toda su estructura que se atraen y se repelen como pequeños imanes, por eso, los cambios de calor o mojar el pelo hacen que se rompa la atracción magnética y por lo tanto se nos encrespe el pelo. El calor y el agua pueden reorganizar las proteínas del pelo rompiendo los enlaces de hidrógeno que mantienen unida su estructura.
La gente suele tender a creer que el problema del pelo encrespado es la humedad, pero en realidad se trata de cuando nos peinamos en ambientes húmedos y luego cambiamos a un lugar más seco es lo que provoca que aparezca ese frizz. Para tratar el cabello en verano y evitar tenerlo tan encrespado debemos, primero de todo, tener una cutícula capilar sana para que el cuero cabelludo trabaje correctamente. Por otro lado, el calor de las herramientas de peinado es lo que influye en el mal estado de la cutículas y de estropearlas, por lo consecuente, crearemos más encrespamiento. Podemos ayudarnos utilizando productos específicos, como son los aceites y los tratamientos hidratantes que pueden restaurar las zonas dañadas. Teniendo el pelo sano evitaremos en gran parte a nuestro estado y aspecto de nuestro pelo.
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