toniEl miedo que tiene el sistema educativo a preguntar a los padres sobre su parecer en torno a la lengua o lenguas vehiculares del sistema, los parámetros y fines educativos, horarios, temáticas, medios y sus usos... En definitiva, el miedo a que participen más allá de asistir a charlas para que sigan las indicaciones que se dan desde el centro educativo es increíble. Todos entendemos que el sentido común marca que no puede haber una atención personalizada para cada alumno. Que no puede haber un sistema por alumno. Pero es que nadie defiende esto. Yo, personalmente, creo que por maxificar el gasto en recursos, medios y gente, primero. Y por reflejar la sociolingüística de un territorio, segundo. El sistema debería basarse en un bilingüismo real en las aulas. Las dos lenguas vehiculares sin porcentajes estúpidos y rotando las lenguas en las materias. Y ya está. Centrémonos en los contenidos y que salgan pensado lo mejor posible del sistema. Perdemos tanto tiempo con estas cuestiones.... En cualquier caso. El rechazo que tienen a preguntar a los padres es tan atronador que habla por si mismo. Sólo por lo enconado de oponerse a ello por parte de estas asociaciones con un marcado carácter nacionalista, es necesario que desde las administraciones se pregunte si o sí. No cabe otra ya.
VirotHas estat tu qui ha comparat sa democràcia amb es franquisme, quedant retratat com un franquista. No t'he dit feixista, que se podria interpretar com un insult genèric i injustificat, sinó franquista per sa comparança que has feta. Sa dictadura franquista va manar quaranta anys a Espanya, i en Franco va morir en es llit. Seria molt estrany que ja no hi hagués franquistes: no han desaparegut perque no han pogut desaparèixer ni els han fet desaparèixer.