Pese a que el ojo humano apenas puede percibirlo, cuando la Luna llena, completamente iluminada por el Sol, coincide con su posición en el perigeo, tiene un aspecto que es un 14 por ciento más grande y hasta un 30 por ciento más brillante que cuando está en el apogeo, es decir, en el punto más distante de la Tierra.
La anterior Superluna, el pasado 21 de enero, coincidió con un eclipse lunar total. La de febrero será la más cercana y mayor, al hallarse nuestro satélite a algo menos de 357.000 kilómetros de distancia de la Tierra. Alcanzó la plenitud en torno a las 17 horas y se podrá observar desde cualquier punto del planeta y durante toda la noche.
El mejor momento para observar el fenómeno es el anochecer, sobre las 18.30 horas, aunque también podrá contemplarse en la madrugada del martes al miércoles.
La próxima Superluna podrá contemplarse el próximo día 21 de marzo y será la última de 2019.
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És tan bonito e interesante la astronomía que al mismo tiempo es un fenómeno de misterio al igual que otros planetas.