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GUILLEM MAS El club de vuelo de s'Olivó de ses Salines ha vuelto a abrir las puertas del aeródromo a pesar de la orden de suspensión de la actividad que pesa sobre los terrenos, a causa de unas obras ilegales que figuran en un expediente de infracción urbanística del Consell de Mallorca.

Un vecino del pueblo ha denunciado ante la Guardia Civil el uso de las instalaciones aportando fotografías donde se ven volando ultraligeros, un ala delta y un autogiro. Unas pruebas que demuestran que se continúa empleando el aeródromo y el hangar a pesar de la prohibición del departamento de Territori de la institución insular.

Hay que recordar que el mes pasado, el Consell de Mallorca inició un expediente de infracción urbanística a Francisco Nicolau, como promotor del campo de vuelo que se ubica en unos terrenos de la familia del ex alcalde Sebastià Vidal, por unas obras ilegales que consistían en unas naves y en una pista de aterrizaje de 1.935 metros cuadrados.

Desde Territori se dio un plazo de dos meses para que el promotor presentara toda una serie de documentación por poder legalizar la situación en la zona.

De todos modos, la ubicación del campo de vuelo a sólo 200 metros del colegio público de ses Salines, provocó que en su día el Consell de Mallorca denegara una solicitud de interés general dada su peligrosidad.

El Ajuntament de ses Salines ha de informar también sobre la licencia de actividad en el campo de vuelo.