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El Centro de Historia y Cultura Militar de Balears celebra su 25 aniversario con una exposición en la que se pueden contemplar las joyas de la corona de sus fundos: La carta que el rey Fernando VII envió al Castillo de Bellver en 1808 para poner en libertad a Jovellanos, una máquina Enigma de la II Guerra Mundial, el bombo con el que durante cerca de un siglo se sorteaba el destino en ‘la mili’ en Palma, el uniforme del general Weyler y así un gran número de documentos, armas y libros que resumen cinco siglos de presencia del Ejército de Tierra en Balears. Entre ellas está el libro más antiguo que custodia el Centro: ‘Destierro de ignorancias de todo género de soldados de infantería’, impreso en 1639 y escrito por el capitán y sargento mayor Antonio Gallo. El manual de infantería de los Tercios. Incluso hay expuesta una ’patente de corso’ concedida por el rey al capitán de un barco en Palma en el siglo XVIII.

La exposición fue inaugurada ayer en un acto militar en conmemoración del aniversario presidido por el general de División Antonio Ruiz Benítez, Director del Instituto de Historia y Cultura Militar del Ejército de Tierra. El coronel José Luis Codina, encargado ahora del centro destacó la «importante acogida popular» de las actividades del centro. «Solo en los últimos diez años han visitado el centro 1,1 millones de personas. Hemos celebrado 204 exposiciones, 762 visitas guiadas o 53 conciertos, lo que da una muy buena idea de su aceptación y de que es un centro muy vivo». Añadió: «Seguimos trabajando para mejorar el nivel de excelencia recibido, para ser un centro cultural de referencia de Palma y de Mallorca que servirá para divulgar y conservar nuestra historia y nuestro patrimonio».
Benítez, por su parte, destacó que el Centro de Baleares «ha sido fiel a la misión que tiene encomendada: proteger, conservar y difundir el patrimonio cultural y bibliográfico del Ejército». Puso en valor la disposición de fondos que abarcan los cinco siglos de historia del Ejército de Tierra. «El centro ha cumplido sus cometidos», sentenció.

El organismo se encarga, además del Centro ubicado en la calle San Miquel, donde está ahora la exposición, en el antiguo Convento de Santa Margarita, el Museo Histórico- Militar del Castillo de San Carlos, el Museo Histórico- Militar de Menorca, el Archivo Intermedio y la Biblioteca Militar, que dispone de más de 60.000 volúmenes en sus fondos desde hace cuatro siglos. Todas las instalaciones están abiertas al público.