Una camarera atendiendo una terraza en la plaza España. | Enrique Fueris |PALMA

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Baleares registró una ocupación media de 532.200 personas en el primer trimestre de 2023, según los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) que ha dado a conocer este jueves el Govern. Se trata de una cifra prácticamente calcada a la del mismo periodo de 2022 y que, según remarca el conseller de Model Econòmic, Turisme i Treball, Iago Negueruela, «confirma un momento muy pujante de nuestra economía», la cual «es capaz de mantener el empleo en el trimestre de menor actividad del año».

De esta manera, el Archipiélago encadena cinco trimestres consecutivos alcanzando máximos de ocupación para el periodo de enero a marzo (desde 2019). A modo de balance de esta legislatura, el conseller y el director general de Model Econòmic i Ocupació, Llorenç Pou, han destacado la creación neta de 16.100 puestos de trabajo. Con respecto al trimestre anterior, la ocupación decreció un 6,7 % (38.600 personas), como es habitual en este periodo del año.

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En lo tocante al paro, este ha experimentado un ligero incremento interanual, del 0,7 % (800 personas) frente a una reducción del 1,5 % de media en el ámbito estatal. De este modo, el número de desocupados se sitúa en 117.900 personas. Una cifra que con todo, se ha reducido en 12.800 personas desde 2015 y que se queda aún más lejos de los 172.000 parados de 2013, el máximo histórico. La tasa de paro, del 18,1 %, se mantiene estable.

Asimismo, la reactivación laboral, destaca el Govern, se ha cimentado sobre una «enorme transformación del mercado de trabajo» que ha reducido en un 9,8 % la tasa de temporalidad desde 2019. «Ha mejorado la calidad del empleo y era obvio que en eso la reforma laboral iba a tener un gran efecto», ha incidido Negueruela.

Por último, el PIB ha aumentado un 6,1 % en el balance interanual en los dos primeros meses, lo cual certifica «el intenso impulso de crecimiento económico». Estos datos superan las previsiones iniciales y permiten confirmar un crecimiento del 3,9 % de crecimiento del PIB, lo cual supondría una subida del 2,8 % del PIB per cápita. En comparación con 2019, el PIB per cápita se incrementaría en un 1,1 % de seguir esta tendencia.