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El presidente del Gobierno de Aragón, Jorge Azcón, ha considerado que el informe de la ONU, que insta a España a que «tome las medidas necesarias» para preservar la memoria histórica frente a las leyes de concordia tramitadas por PP y VOX en varias Comunidades Autónomas, entre ellas la aragonesa, «debería ser más serio» y que contiene «errores de bulto» y «bulos».

En declaraciones a los medios de comunicación durante su visita a la celebración del Primer Viernes de Mayo, en Jaca (Huesca), el presidente autonómico ha dicho que se ha enterado de este informe «por los medios de comunicación», lo que, a su juicio, es «muy difícil de explicar».

Ha asegurado que la ONU no se ha dirigido al Gobierno aragonés y «posiblemente esa falta de información es la que ha hecho que cometa errores de bulto».

Azcón ha añadido que en Aragón se ha anunciado un plan de concordia, pero «no hay ninguna tramitación de una ley como el informe dice en su primera página».

Por tanto, ha subrayado que lo que dice el informe de la ONU «es lisa y llanamente mentira». «Posiblemente si se hubieran preocupado de hablar con el Gobierno de Aragón les hubiéramos explicado qué es lo que de verdad está ocurriendo y no habrían cometido errores de bulto como han cometido, entiendo que influenciados exclusivamente por la información que les ha trasladado el Gobierno de España», ha agregado.

El presidente aragonés ha explicado que el plan de concordia anunciado es un plan «en el que todo el mundo pueda verse reflejado», por lo que «debería haber más seriedad en ese tipo de informes», especialmente cuando se trata «de organismos internacionales tan importantes».

«Si no hay seriedad, ni en el fondo ni en la forma, deja en mal lugar a la ONU, que no ha querido tener la información de todas las partes», ha remarcado Azcón, quien ha insistido en que dicho informe «tiene que ser contrastado» con la opinión del Gobierno de Aragón.

Azcón se remite a la mayoría parlamentaria

Por lo demás, ha subrayado que la derogación de la Ley de Memoria Democrática se aprueba democráticamente porque hay una mayoría parlamentaria en las Cortes de Aragón que entiende que «esa ley es una ley de parte» y que «no responde a lo que queremos que sea el espíritu de la transición».

En opinión de Azcón, «no hay leyes que no se puedan derogar por quienes aprueban las leyes» y es «muy difícil de explicar que haya quien crea que un parlamento democráticamente elegido por los aragoneses no tiene capacidad de decidir cuáles son las leyes que se aprueban o se derogan».

Sobre el plan de concordia, ha señalado que «quiere unir en los valores de concordia, de unión, de libertad, de igualdad, de pluralismo político», que son «los valores que han significado la vuelta a la democracia en este país».

En consecuencia, Azcón se ha mostrado convencido de que el plan de concordia no va a tener enmiendas porque «va a ser un plan en el que todo el mundo se pueda ver reflejado».