La alcaldesa de Zaragoza, Natalia Chueca, acompañada por el consejero municipal de Participación Ciudadana, Alfonso Mendoza, saluda a los vecinos delante del antiguo Mercado del Pescado, en Delicias | DANI MARCOS

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El Gobierno de Zaragoza aprobará en su próxima reunión dos proyectos de revitalización urbanística y social en el distrito de Las Delicias, que supondrán una inversión global de 7 millones de euros. Así lo ha avanzado este martes la alcaldesa de la ciudad, Natalia Chueca, acompañada por el consejero municipal de Participación Ciudadana, Alfonso Mendoza.

Ambos han visitado las instalaciones del Centro Cívico del distrito, que verá ampliados sus servicios con una inversión de 759.985,9 euros para transformar los espacios del antiguo restaurante del Mercado del Pescado. A esto se sumarán los 6.288.461,11 euros del proyecto de la segunda fase de la reforma integral de la avenida de Navarra, entre el paseo de Calanda y la calle de La Rioja, junto frente al actual Centro Cívico que ahora se verá ampliado.

Esta apuesta «decidida» por el distrito de Las Delicias cumple así con los compromisos adquiridos por el actual equipo de Gobierno liderado por Chueca.

Por un lado, el Gobierno de Zaragoza dará luz verde al proyecto de obras de adecuación del antiguo restaurante del Centro Cívico Delicias, que se levanta en su día en el que era conocido como el Mercado del Pescado. La inversión será de 759.985,9 euros, IVA incluido, y un plazo de ejecución aproximado de 8 meses.

El mercado del pescado

El arquitecto municipal Marcelo Carque Anyesa proyecta en 1960 el antiguo mercado de pescado dotando al edificio una disposición claramente funcional con una estructura de hormigón armado, fábrica de ladrillo rojo caravista, cubierta de teja cerámica plana, pavimentos interiores de piedra y mármol, y constaba de tres plantas: sótano, principal y alta, donde los puestos de exhibición y venta de productos se disponían radialmente en torno al espacio circular destinado al público que caracteriza al edificio.

Su primera reforma se realiza en 1986-1987 para centro cultural de la zona debido a la creación de Mercazaragoza, y su última rehabilitación y ampliación fue en 2010.

El restaurante y marisquería que daba a la avenida de Navarra, espacio que ahora se integrará en el Centro Cívico, se mantiene abierto desde 1960 hasta diciembre de 2014, una vez finalizada la concesión de 50 años y su prórroga de 4 años más.

El que fuera restaurante-marisquería se encuentra a una cota de 1,5 metros aproximadamente respecto a la calle, accediendo a él mediante unas escaleras o una rampa empleados por todo el centro cívico. El local, de forma irregular, consta de planta baja y primera, adosado al equipamiento vecinal, accediendo a la primera planta a través de unas escaleras de 1,3 metros de anchura libres. Toda el área, abandonada y con signos de vandalización desde 2014, tiene una superficie útil de 222,75 metros cuadrados, y consta de zona diáfana de bar, cocina, almacén, pasillos, aseos, comedor y office.

La reforma

Con las obras que emprenderá el Ayuntamiento se obtendrán hasta 285 metros cuadrados útiles y se plantea la creación de una sala polivalente y un pequeño almacén en planta baja y dos aulas con una sala polivalente previa en planta primera, todo ello accesible desde el interior del centro cívico.

Se procederá a la demolición del interior de planta baja y primera del restaurante dejándola totalmente diáfana para el posterior desmontado de las cubiertas planas de planta baja --la parte de la terraza-- y primera dejando al descubierto las vigas metálicas existentes.

Después del proceso de derribo se realizarán unos nuevos forjados de planta baja y primera reutilizando parte de la estructura metálica existente. A partir de ahí se ejecutará la nueva distribución planteada en el proyecto, se harán los acabados y se mejorará el acondicionamiento acústico del salón de actos anexo de la planta baja.

Revitalización de la avenida de navarra

Además, el Gobierno de la ciudad, como ha anunciado la alcaldesa de Zaragoza, Natalia Chueca, aprobará en breve el proyecto de la reforma de la segunda fase de la avenida de Navarra, entre el paseo de Calanda y la calle de La Rioja.

Con un plazo de 12 meses y una inversión de 6.288.461,11 euros, el proyecto ya ha pasado por información pública y se han estimado parcialmente algunas de las alegaciones presentadas, enriqueciendo así el proyecto.

De este modo, se mejorarán las zonas de carga y descarga para dar servicio a los comercios de la zona, se trasplantarán 23 adelfas y habrá planificación de los trabajos para garantizar y facilitar los accesos en las zonas de intersección de las calles.

La reforma consolidará la transformación de la calle con un diseño donde destaca el paseo arbolado con más de 2.300 metros cuadrados destinados a zonas verdes y espacios de encuentro vecinal.

Como novedad, se creará un área de ejercicio para personas mayores equipado con varios elementos para trabajar la movilidad y una pequeña zona de juegos infantiles. Todo ello dará continuidad a la reforma de la primera fase, en la que se han invertido 3,9 millones de euros.

Frente a los primeros 16.000 metros cuadrados reformados, en esta segunda se actuará sobre 19.000 metros cuadrados, creando amplias aceras totalmente accesibles.

Doble de zona verde

Se duplicará la superficie de zonas verdes con cerca de 1.350 metros cuadrados y 140 árboles y se destinarán otros 950 metros cuadrados a zonas de estancia. Además se ha querido dotar a la avenida de nuevos equipamientos que ayuden a compensar las carencias que tiene esta zona consolidada de la ciudad, especialmente el área
de Delicias. Para tratar de revertir esta situación, en la acera sur se creará una sencilla zona de ejercicio para personas mayores.

Estará ubicada junto al paseo de Calanda, en las proximidades de la residencia para la tercera edad. Además, en esa misma acera, a la
altura del Centro Cívico, habrá una pequeña zona de juegos infantiles, que completará la que se ha estrenado en la confluencia de las avenidas de Navarra y de Avenida. Ambos equipamientos estarán adaptados a las dimensiones de la banda verde que recorrerá la avenida.

Continuando con el diseño de la primera fase, la calzada se organizará con dos carriles de circulación por sentido y carril bici segregado por la parte central. Como novedad, los cruces con las calles transversales se elevarán en plataforma única para dar prioridad a los peatones, obligando a los vehículos a frenar y aumentar con ello la seguridad vial.

Para mejorar la seguridad de los peatones, se eliminará el carril bici que ahora discurre frente al Centro de Especialidades Inocencio Giménez y la conexión ciclista se realizará a través de la rotonda de la calle Rioja.

Se renovarán todos los servicios que discurren por el subsuelo, entre ellos la grandes tuberías de abastecimiento de agua y saneamiento que recorren la avenida.

También se sustituirá todo el alumbrado para incorporar tecnología led y se colocarán nuevos puntos de luz para mejorar sobre todo la iluminación de las aceras.