Imagen de los jugadores del Palma Futsal posando tras el acto. | Palma Futsal

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El Palma Futsal quiere dar un paso más a nivel social y prepara una nueva iniciativa con la que quiere recorrer los municipios de Mallorca a partir de la próxima temporada y en la que participarán los colegios de toda la isla que lo deseen cuando el club visite sus respectivos municipios.

La prueba inicial de este proyecto tuvo lugar este lunes con la participación de 1.100 niños de Primaria de los colegios de Capdepera y Cala Ratjada que se desplazaron al Poliesportiu ‘Es Figueral' de Capdepera para recibir con todos los honores a la plantilla del Palma Futsal y disfrutar de un espectáculo cargado de deporte y mucha diversión, en el que los jugadores del Palma Futsal muestran sus dotes como jugadores y en otras facetas desconocidas hasta el momento.

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El show comenzó con la mascota del Palma Futsal, Na Roqueta, que hizo bailar a todos los niños presentes con un concurso de baile para calentar el cuerpo antes de la salida de la plantilla a la pista del pabellón y aclamados por el millar de niños que disfrutó con esta iniciativa. Hubo duelos de ‘futsal mesa', un deporte inventado para la ocasión y en el que Eloy Rojas y Joao se impusieron a la pareja formada por Tomaz y Felipe Paradysnki, que contaron con dos speaker de excepción como Carlos Barrón y Juanjo Catela.

El evento sirvió para conocer dotes artísticas desconocidas hasta ahora por parte de los jugadores del Palma Futsal como la actuación más sorprendente del evento, la de Diego Quintela imitando a Chayanne con una puesta en escena que firmaría cualquier artista y arropado en los coros y en el baile por una buena parte de la plantilla. La música dio paso a una serie de partidos de fútbol sala, primero con la plantilla al completo enfrentándose entre sí y luego en un partido contra una amplia selección de los niños presentes, en un partido que comentaban los propios jugadores del Palma Futsal a través de la megafonía y gracias a un micrófono que llevaban incorporado.

El show se alargó durante una hora y acabó con la firma de autógrafos y fotos de los jugadores con los niños antes de que éstos regresaran a las aulas tras una hora cargada de diversión y entretenimiento.