Son Moix sonríe al ritmo del Palmer Basket Mallorca

La escuadra de Ciutat, que contó con el respaldo de cerca de 2.000 espectadores en las gradas en su debut en casa, se vieron superados de inicio por la calidad de los visitantes, que consiguieron incomodar a los isleños y hacer funcionar su ataque.

El guion del primer acto tuvo continuidad en el segundo propiciando que el choque se fuera al descanso con una ligera ventaja canaria en un marcador que se estropeó retrasando el regreso al parquet de los protagonistas.

El parón dio la sensación de sentarle mejor a los mallorquines, que se hicieron más fuertes en defensa y dejaron constancia de su repertorio ofensivo para firmar un parcial de 23-14 culminado por un 2+1 de Toni Vicens que les daba ventaja antes del último cuarto.

La exigencia física hacía mella en el Gran Canaria B a medida que brillaba la profundidad de banquillo de un Palmer Mallorca que aseguró su segunda victoria en dos partidos.