Se pueden utilizar varias frutas frescas.

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Hace un par de días hablé con Marc Fosh, un chef británico con estrella Michelin, instalado aquí en la Isla. Entre otras cosas hablábamos sobre un postre muy típico de su país nativo que me recordaba a mis días viviendo en Oxford y Londres. El Eaton Mess es un postre británico clásico que combina merengue, crema batida y frutas frescas, todo en un delicioso y desordenado conjunto. Su origen data del siglo XIX, y hay varias teorías sobre cómo surgió este peculiar nombre. Una de las historias más populares es que el postre fue creado accidentalmente en el colegio Eaton, cuando un pabellón de merengue se derrumbó durante un evento, y en lugar de desecharlo, se mezcló con crema y frutas, resultando en esta delicia desordenada. Otra teoría sugiere que el nombre ‘Eaton’ proviene de la región de Eaton, en Norfolk, donde se dice que el postre se originó.

Independientemente de su origen exacto, el Eaton Mess se ha convertido en un postre muy querido en Reino Unido y más allá. Su popularidad se debe en parte a su simplicidad y versatilidad. Se pueden utilizar varias frutas frescas, como fresas, frambuesas, moras o mangos, para añadir color y sabor al postre. Además, algunas variaciones incluyen añadir salsa de frutas, licores o incluso chocolate rallado para darle un toque extra de indulgencia. Mi favorito es de frambuesas.

Para hacerlo en casa necesitamos 4 claras de huevo, 200 g de azúcar blanco, 300 ml de crema para batir, 1 cucharadita de extracto de vainilla, 350 g de frambuesas frescas, cortadas en trozos, 2 cucharadas de azúcar glas, hojas de menta fresca para decorar. Instrucciones: Precalienta el horno a 120°C y forra una bandeja con papel pergamino. En un tazón grande, bate las claras de huevo a punto de nieve. Agrega gradualmente el azúcar blanco mientras sigues batiendo, hasta que la mezcla esté brillante y firme. Con una espátula, forma montones de merengue en la bandeja preparada para hornear, dejando espacio entre cada montón. Hornea los merengues durante aproximadamente 1 hora, o hasta que estén secos y ligeramente dorados. Luego, déjalos enfriar completamente. Mientras tanto, en un tazón grande, bate la crema para batir con el extracto de vainilla hasta que forme picos suaves. En otro tazón, mezcla las frambuesas cortadas con el azúcar glas, aplastándolas ligeramente con un tenedor para liberar sus jugos. Para armar el Eaton Mess, rompe los merengues en trozos grandes y colócalos en copas individuales. Cubre los merengues con la crema batida y luego añade las frambuesas endulzadas. Decora con hojas de menta fresca y sirve.