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Sabemos hace tiempo, porque allá por los años sesenta nos lo dijo en La sociedad del espectáculo el filósofo francés situacionista y borracho Guy Debord, que todo es espectáculo, cosa que refrendó después pegándose un espectacular tiro en el corazón y saliendo por el foro. Sí, estamos enterados, pero va siendo hora de que sepamos qué se entiende ahora por espectáculo, o dicho de otro modo, qué es ese todo que nos define. Eurovisión, por ejemplo. He aquí un espectáculo exitoso a nivel continental, que en aquel tiempo de filósofos duraba un día, y ahora todo el año, con sucesivos eventos competitivos y constante presencia en los medios de información. La cantante y bailarina Chanel, que nos representó en 2022 y por obvias razones de espectáculo enseñaba mucho el culo, pese a no ganar ha permanecido en pantalla más de un año, incluidos telediarios, mostrándonos eso una y otra vez, pero como aquí somos más igualitarios que nadie, ahora llevamos meses viendo a diario los culos de dos señores de mediana edad, en un espectáculo llamado Zorras (las zorras son ellos) que además de no ganar, hicieron el ridículo. Y aun así, todavía seguiremos viéndolos Dios sabe cuánto tiempo, incluidos telediarios. Total, que el culo, de cualquier género, es algo muy importante en lo que entendemos por espectáculo. No sé si eso es lo que esperábamos de la anunciada sociedad del espectáculo. Puede que Debord sí, y de ahí que se pegase un tiro. En cualquier caso, el espectáculo debe continuar, no nos quedemos en Eurovisión. Las campañas electorales, que duraban 15 días, duran ya toda la legislatura, y la política como espectáculo, aunque no figure en la sección de espectáculos de la prensa como sí lo hace la cultura (cultura y espectáculos), copa casi todos los espacios informativos. Hasta las guerras y la judicatura forman parte del gran espectáculo global (el famoso escenario), en el que unos ganan y otros pierden. Que es la esencia del espectáculo. Culos aparte, naturalmente, puesto que la intimidad todavía es el espectáculo en sí. Y no mencionamos internet, el espectáculo infinito. En fin, qué mierda de espectáculo nos están dando. No me esperaba yo esto en la sociedad del espectáculo.